Gijón, J. E. CIMA

Una vez acabado el partido, algunos jugadores del Sevilla se mostraron muy agresivos, especialmente Fazio, y en el túnel de vestuarios se quedaron esperando a los rivales. Allí se enzarzaron algunos a golpes y las fuerzas de seguridad del club tuvieron que intervenir con determinación para separarlos. El árbitro expulsó al sevillista Coke porque entre otras cosas le gritó «esto sigue porque todo esto lo armaste tú pitando el partido», después de haberse enzarzado con Carmelo. Precisamente al ver que querían agredir a su compañero hubo rojiblancos como Bilic, Eguren, Iván Hernández y Gregory que tuvieron que intervenir para poner paz. También Míchel y Clemente ayudaron para que cada grupo de jugadores fuera para sus vestuarios.