El Atlético de Madrid, con el asturiano Alberto Entrerríos en sus filas, volvió a inscribir veinticinco años después su nombre en el palmarés de la Copa del Rey, tras imponerse ayer por 37-31 al Barcelona del menor de los Entrerríos, Raúl. Alberto colaboró con dos goles al triunfo de los colchoneros, en tanto Raúl fue el jugador más efectivo de los azulgranas, con seis tantos. El Barcelona ganaba 14-15 al descanso, pero la soberbia actuación del meta José Javier Hombrados en la segunda parte decidió el título para el Atlético.