Oviedo, N. A.

«Veía que a medida que hablaba con los hombres de Slim -Arturo Elías y Juan Fábrega, asesor jurídico- el acuerdo podía estar cerca. Soy una persona tranquila de por sí, pero su interés me causó buenas sensaciones desde el primer momento». Toni Fidalgo explica, con la relajación que otorga el trabajo bien hecho, su aparente tranquilidad en las jornadas finales de la ampliación de capital.

El desenlace ha logrado salvar al Oviedo de una desaparición segura, por eso a la hora de analizar lo ocurrido Fidalgo ensalza lo logrado por los oviedistas en tan poco tiempo: «Entre el 12 de julio y el 17 de noviembre hemos pasado de la nada al todo. Me siento feliz y realizado por haber cumplido el empeño por el que fuimos elegidos por el Ayuntamiento».