Ni tenían que estar ni se les esperaba. Finalmente llegaron tarde, interrumpiendo la rueda de prensa y se hicieron notar dando la nota. No se salvó ningún grupo municipal gijonés. Pocos minutos antes de que comenzasen las comparecencias de Villa y Mata en la sala de recepciones del Consistorio gijonés, el encargado de protocolo retiraba los bártulos de los periodistas de las dos primeras filas de asientos y repartía carteles de reservado. Los concejales, eso sí, no intervinieron. Los foristas Pedro Barbillo y Fernando Couto saltaron como un resorte para pedir a los jugadores que no respondieran a una pregunta sobre la manifestación que se celebraba en el exterior. Al popular Pecharromán le sonó el móvil. Con la rueda de prensa ya iniciada, llegó Francisco Santianes, de IU, interrumpió a Villa, caminó sin reparos ante las cámaras y se quedó plantado en el pasillo. Hasta que las quejas lo obligaron a sentarse. El socialista Santiago Martínez Argüelles llegó más tarde aún y, nada más sentarse, sacó su móvil para hacer fotos a los futbolistas.