Han tenido que pasar 23 años para que el Sporting viera el debut de otro miembro de la familia Serrano con 18 años. Lo hizo el central Mino en 1981 y el pasado domingo repitió la historia su hijo Alejandro Serrano García (Barcelona, 6-2-95) que se estrenó como jugador del Sporting y en Tenerife.

-Por fin llegó el momento...

Sí. Llega en enero, curiosamente, en Segunda B debuté también un mes de enero. Estoy muy contento y muy agradecido. Creo que las cosas han salido bastante bien. Faltó la puntilla de que entrase alguna ocasión, pero sumamos un punto que va a servir para estar arriba al final.

-¿Se hizo larga la espera?

Sí, se hizo larga, pero sabíamos que en cualquier momento podía llegar. Hay que seguir trabajando y luchando por estar ahí.

-Es el primer paso de una carrera que se espera larga.

Eso es. Tenía mucha ilusión de poder debutar en Segunda con el Sporting que es mi equipo de toda la vida. Ahora espero tener la oportunidad de debutar en El Molinón.

-¿Cuándo supo que jugaría?

El sábado ya me adelantó algo el entrenador y durante la semana me lo había insinuado, pero no estuve seguro hasta la charla previa al partido. Sabía que con la baja de Nacho Cases se podía dar el caso y así fue.

-¿Cómo reaccionó?

En cuanto vi la alineación se me puso una sonrisa, me dije que era el momento, que había que salir al campo, dar lo mejor de mí y reaccionar.

-¿Qué le dijo su padre?

Que jugara tranquilo, como yo sé. El vivió esta experiencia bonita de disfrutar del fútbol.

-¿Ha sido un año difícil?

Sí, no ha sido bueno, sobre todo porque tengo 18 años. Nosotros apostamos por ello, sabíamos que no iba a ser fácil, pero que en cualquier momento podía darse este caso.

-¿Se arrepintió alguna vez de la decisión de no jugar en el filial?

No. Lo teníamos muy claro, sabíamos que había que ir quemando etapas y me sentía muy ilusionado con poder ayudar al equipo en Segunda. Desde el primer momento creímos en esto, pero las cosas se torcieron un poco con la lesión.

-¿Tuvo algún bajón?

Siempre que no juegas tienes bajones y más con 18 años. Mentalmente me considero un futbolista fuerte, sabía que podía llegar.

-¿Cambia esto su postura ante el mercado de invierno?

No, sólo pensamos en el Sporting y no tenemos ninguna intención de salir fuera. Con el paso que acabo de dar, sólo pienso en seguir creciendo.

-¿Cómo se vio?

Bien, pensé que me iba a encontrar más cansado porque llevo tiempo parado y eso se nota.

-¿Extrañó la posición?

Con Abelardo el año pasado ya jugué en bastantes posiciones así que estaba preparado para jugar ahí y hacerlo bien.