La punta de flecha es un amuleto muy antiguo de defensa, pues muchos guerreros astures llevaban este símbolo colgado al cuello para defenderse de los malos espíritus. Y resulta que ese amuleto ha resultado ser un fiel aliado del riosellano Walter Bouzán.

Lo anecdótico del caso es que el amuleto en cuestión es propiedad del también riosellano Jorge Núñez, uno de los mejores barranquistas a nivel mundial, el cual lleva a todas sus expediciones, gran amigo de Walter y Fiuza. Hace unos años, en 2004, en los Juegos Olímpicos de Atenas, ese mismo amuleto lo portó Fran Llera, consiguiendo en aquella cita un diploma olímpico, sexto puesto en K-2 500 metros, con Damián Vindel; y en las últimas seis ediciones del Sella lo ha lucido -aunque ligeramente tapado por su elástica- Bouzán.

En las prolegómenos de la septuagésima novena edición del Sella, mientras se palpaba la tensión pre-carrera, unas tres horas antes de darse la salida a la prueba, Walter Bouzán buscó a su entrañable amigo Jorge Núñez, que estaba controlando el acceso rodado a la empresa para la que presta servicios (Cangas Aventura), para pedirle que le dejase el citado amuleto. Jorge no se lo pensó ni un instante y se lo dejó para seguir haciendo historia en el Sella.