La dura negociación que han mantenido Sergio Ramos y el Real Madrid durante todo el verano concluyó ayer con un acto en el que se confirmó la ampliación de contrato del central hasta 2020 y unos diez millones de euros por temporada. De esta forma se cierra uno de los "culebrones" del verano en el fútbol internacional y en la casa blanca. Tras la marcha de Íker Casillas al Oporto, el Madrid se asegura la continuidad de su capitán y pone punto y final a los rumores que situaban al jugador de Camas en el Manchester United esta campaña.

En este mercado estival, Ramos sonó con fuerza para el United e incluso Louis Van Gaal llegó a confirmar el interés en el defensa español. También el supuesto interés en la contratación del guardameta David de Gea por parte del conjunto blanco alimentó los rumores sobre posibles trueques con salidas y llegadas. Pero tras meses de negociaciones y de un supuesto tira y afloja con respecto a las cifras de la renovación, el "culebrón del verano" ha llegado a su fin con el central firmando la prolongación de su contrato con el club en el que se ha hecho grande, con el que firma hasta 2020, cuando tendrá 34 años.

Sergio Ramos admitió que continúa en el club blanco pese a tener propuestas superiores, y asegura que vivió momentos duros por "circunstancias personales que solucionar" pero no por discrepancias económicas con la directiva. "Sinceramente, si fuese un tema económico no me hubiese quedado, en otro sitio podía haber ganado más dinero. Pero no es cuestión de dinero, había circunstancias personales que solucionar. Ya lo están y encantado de seguir en mi casa", aseguró.

"Como dije hace diez años formar parte de este club es un sueño que quiero disfrutar al máximo. Doy las gracias a todos, a mi hermano y agente, amigo que vela por mi bienestar que ha hecho posible que estemos aquí. Gracias por tu incondicionalidad", comenzó asegurando en un intento de limpiar la imagen de René Ramos, diana de muchos en las largas negociaciones.

"Gracias a mi familia, que me ha ayudado a mantener el equilibrio profesional y personal. Agradezco a mi entrenador por estar aquí, a mis compañeros por la proximidad, cariño y respeto de estos días. Gracias a la afición que ha estado desde mi llegada y estará en el futuro, me habéis demostrado apoyo y un cariño que no olvidaré nunca. Formar parte de este club, el más grande del mundo, y como capitán es un honor, un privilegio y compromiso que afronto con sinceridad, ilusión y honradez", añadió. Por último quiso dejar un mensaje sobre su compromiso. "Las negociaciones han sido largas, pero mi cabeza y mi corazón siempre han estado aquí. No puedo estar más contento y solo puedo decir ¡Hala Madrid!"

Florentino Pérez aseguró que el defensa andaluz es "un símbolo del madridismo". El mandatario blanco, en un acto que contó con la presencia de la familia del internacional, así como del técnico, Rafa Benítez, afirmó que era "un gran día para este club" al poder anunciar la ampliación de contrato del zaguero por tres años.

Indicó que Sergio Ramos ha conquistado a la afición con su "entrega", "coraje", "carácter" y "con su inmenso corazón tanto dentro como fuera del campo", así como destacó que es "un referente" y un "líder" en el equipo, cuyos códigos hizo suyos "desde el primer día" que llegó.

El presidente del Real Madrid aseguró que "Ramos lo ha ganado todo, pero al igual que el Real Madrid siempre quiere mucho más y para ello necesitamos mantener firme el deseo inconformista en busca de nuevos triunfos", continuó. "Por eso es importantísimo que un jugador de su entrega y liderazgo continúe dando ejemplo a los que llegan al club".

Insistió en que "Ramos es el cabezazo de Lisboa, símbolo de la Décima, del espíritu de superación permanente. También de nobleza y amor por el Real Madrid", y recordó que esta temporada portará el brazalete de capitán "con honor y orgullo, como Casillas los últimos cinco años. Con trabajo y talento has conquistado el corazón de millones de aficionados del Real Madrid de todo el mundo".