Otra pista para entender las exageraciones que conlleva el fútbol. La revista Forbes hizo pública la pasada semana la relación de los deportistas mejor pagados de la historia, contando los ingresos de su época en activo hasta la actualidad. Pues resulta que entre los diez primeros sólo hay un futbolista, David Beckham, relegado hasta el octavo puesto. Mandan los jugadores de baloncesto (con Michael Jordan a la cabeza y otras dos estrellas de la NBA como Kobe Bryant y Shaquille O´Neal), abundan los jugadores de golf (cuatro en el "top-ten") y también hay sitio para un piloto de Fórmula 1 (Michael Schumacher) y el boxeador más mediático de los últimos tiempos, Floyd Mayweather. Son datos que indican por donde van los tiros: todo depende de las audiencias y de la explotación comercial. Y para eso, los norteamericanos van muy por delante de Europa.