Rubén Palazuelos es una referencia en el centro del campo del Avilés, pero el cántabro se está destapando como técnico en el cadete A, junto con Jhony. Los avilesinos bajaron la temporada pasada a Segunda y se han fijado como objetivo el recuperar de inmediato la máxima categoría.

Y la temporada no va mal, aunque aún queda mucho. Los blanquiazules son segundos con 46 puntos, cinco menos que el Oviedo, y dos más que el Grujoan ovetense, que es el máximo rival puesto que los azules no pueden subir al tener el primer equipo en Primera y el cuarto, el Covadonga B tampoco sube por el mismo motivo. El siguiente candidato al ascenso es el Lugones, que está a siete puntos. El partido clave ante el Grujoan llegará en tres jornadas (el 11 de marzo) y será en Oviedo. El Avilés ganó en la ida (3-1).

La experiencia no es nueva. Palazuelos ya entrenó el pasado año en las categorías inferiores del Guijuelo y solicitó un equipo tras fichar por el Avilés el pasado verano. "Estoy muy contento porque me gusta estar con los chavales y estoy aprendiendo mucho, que es lo importante porque me atrae la idea y en el futuro me gustaría entrenar".

La cadete es una categoría clave en lo personal porque, señala Palazuelos, "los jóvenes futbolistas tienen una edad que puede ser complicada porque están empezando con otras cosas de la vida, que son normales, y hay que reconducirlos en ciertos momentos"; y en lo futbolístico, explica, "el paso de cadetes a juveniles quizás sea el más grande porque son chavales de 15 años que cuando pasen a juveniles se van a encontrar con gente ya hecha, hombres que les sacarán uno o dos años, pero es fútbol y hay que pasar por todas la etapas, formarse y aprender de todo". Le motiva el "transmitir a los chavales valores para la vida, que es lo más importante en estas edades, más que el fútbol", y "ver que van progresando día a día".

Y considera que hay "buena materia prima" en el equipo y en la cantera, si se trabaja bien. "El Avilés siempre sacaba chavales para el equipo y para otros sitios, y eso es lo que hay que potenciar otra vez a base de trabajar bien y de cuidar a los jugadores porque ese es el futuro de los equipos". Y añade: "Tenemos buenos futbolistas en todas las categorías, pero hay que ir paso a paso para que se vayan formando".

La cantera blanquiazul sufrió mucho en los últimos años hasta quedarse prácticamente sin jugadores y el objetivo es recuperar el prestigio perdido con un trabajo que, señala Palazuelos, "se podría hacer mejor en ciertas cosas, como todo en la vida, pero es lo que hay y con eso tenemos que trabajar día a día, enseñarles todo lo que se pueda y formarles para la vida y para que sean buena gente. Y ya veremos si en el futuro el Avilés sigue sacando jugadores de la cantera".

El cántabro tiene los niveles 1 y 2 de entrenador y deja el tercero para "dentro de muchos años", cuando deje de jugar . "Entonces tendré tiempo y lo sacaré porque llevo mucho en el fútbol y me gustaría seguir haciendo cosas cuando no juegue. Estoy empezando en esto de entrenar y ojalá que el día de mañana pueda hacerlo en algún sitio", concluyó.