Las condiciones para la venta del Real Avilés ya están fijadas. Las negociaciones entre Julio Scheilch, en representación del actual propietario José María Tejero, y Dennis Colmenares, por parte de firma mexicana IQ Finanzas -gestora de la entidad- para que el club blanquiazul pase a manos aztecas parece haber llegado a buen puerto y el acuerdo es total. Aunque la firma, de plasmarse finalmente, no se realizará al menos hasta mediados de agosto. El acuerdo pasaría por que los mexicanos paguen dos millones por el club a José María Tejero y otro millón más si el equipo sube a Segunda. Ahora queda por delante algo tan complicado como la propia negociación: ejecutar el acuerdo.

El siguiente paso es revisar el contrato, una propuesta del grupo gestor mexicano que recoge lo negociado entre las dos partes, pero que todavía no tiene el visto bueno del actual propietario. Se espera que esta condición se cumpla en las próximas horas, cuando se reciba el documento y pase por manos del abogado de José María Tejero. Ese será el primer escollo de este proceso de venta, que podría alargarse durante todo el verano.

El segundo paso es efectuar el pago, o al menos presentar las garantías de que se realizará. El Avilés se traspasaría por al menos dos millones de euros -al margen de la cláusula del ascenso- que se pagarían a plazos durante tres años. A ese montante hay que sumarle las deudas que tiene el club y que asumiría el nuevo propietario, IQ Finanzas. El agujero se calcula en 800.000 euros. La cantidad inicial -el primer pago que recibiría la propiedad- sería el único punto en el que todavía no hay un acuerdo cerrado, aunque sí una voluntad de llegar a él. Y es que IQ Finanzas, un grupo inversor, tendrá que reunir el dinero necesario para cubrir esa "entrada". Tejero ha dado un plazo de algo más de un mes para cerrar este punto, de ahí que la firma no se haga efectiva hasta que el dinero esté sobre la mesa. En apenas unos meses, la sección deportiva de IQ Finanzas se ha puesto al frente de la gestión del Real Avilés y ha comprado dos clubes en México: el Tepatitlán de Morelos, en la serie A de la Segunda División (tercer nivel nacional) y el Internacional San Miguel de Allende, para el que además ha adquirido una franquicia en la misma división, aunque en categoría B. De efectuar la compra del Avilés, serían cuatro grandes desembolsos en menos de un año para el grupo gestor mexicano, ya que en el club blanquiazul ha invertido más de 400.000 euros.

Llegue a firmarse o no, por el momento este acuerdo parece haber desbloqueado la situación insostenible a la que había llegado el club, que tiene paralizados todos los derechos federativos. El club no podrá fichar ni llegar a acuerdos con jugadores hasta que se haga frente a la deuda con la plantilla, a la que se adeuda la última mensualidad y las primas de la temporada 2015-2016, lo que supone un total de 32.000 euros. Se trata de una deuda convertida en pagarés, previa a la llegada del grupo inversor al seno blanquiazul. Por esa razón, el grupo se había negado hasta ahora a asumirla, en contra del criterio de Tejero, que defendía que la deuda no era del club sino de la empresa Real Avilés Gestión Deportiva, a través de la cual los mexicanos gestionan la entidad.

Ahora, IQ Finanzas tiene previsto hacer frente a esta deuda el próximo lunes, una muestra de confianza en que la venta del club se produzca finalmente.