La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Anquela vs. Baraja: los entrenadores de Oviedo y Sporting hablan sobre el derbi

Juan Antonio Anquela: "Sólo le pido a mi equipo que esté a su nivel" | Rubén Baraja: "Mis recuerdos del Tartiere son malos"

EL DERBI: Anquela VS Baraja

EL DERBI: Anquela VS Baraja

Para ver este vídeo suscríbete a La Nueva España o inicia sesión si ya eres suscriptor.

EL DERBI: Anquela VS Baraja Nacho AZPARREN | Gijón, Víctor RIVERA

Anquela

A Juan Antonio Anquela le agradó tanto la experiencia de la primera vuelta que cuando se le pregunta por aquella tarde de septiembre elogia hasta el tiempo. "Con lluvia intensa, como un partido de Premier League", dice con su habitual sonrisa guasona. Anquela es feliz entrenando, se le ve cómodo en Oviedo, y quiere mantener ese espíritu optimista, atrevido y directo, en el duelo ante el eterno rival. Le apoyará una grada incondicional que ya ha mostrado su fidelidad en diferentes escenarios. "Solo intentamos estar a su altura", repite el jienense como un mantra. Solo lleva 8 meses en Oviedo, pero ha captado perfectamente la esencia del club azul. También ha entendido lo que significa un derbi.

Anquela, 272 partidos en Segunda, conoce de primera mano lo que sienten los seguidores azules, sabe que es un partido con un sabor especial, pero en su hoja de ruta resaltan las mismas las mismas palabras que todo el año: calma, tranquilidad, repetir la rutina. Anquela atiende a LA NUEVA ESPAÑA para mostrar sus impresiones sobre el encuentro del domingo.

-Echando la vista atrás, ¿su semana más especial en Oviedo hasta ahora ha sido la del derbi de la primera vuelta?

-No, no. Si le digo la verdad aquella semana no me enteré de nada de lo que rodeaba al partido hasta el viernes. Eso sí, cuando salimos a entrenar en el Tartiere, el día antes del derbi, con toda esa gente dije ´uyuyuy€ ¿pero qué pasa aquí?´.

-¿No le habían dicho nada los aficionados por la calle los días antes al partido?

-Es que yo soy poco de salir de casa. Y siempre que lo hago la gente es muy respetuosa conmigo. Cuando me dicen algo se nota que hablan con el corazón. Y yo respeto lo que dicen.

-¿Qué poso le dejo el derbi de El Molinón de la primera vuelta?

-Muy bueno. Hay algunas cosas que me quedaron marcadas. Una de ellas es la imagen de mis azules, ahí en el fondo del estadio lleno. Recuerdo que no se arrugaron y apretaron desde el primer al último minuto del encuentro. Y, además, ver a mi equipo, que en ningún momento se vino abajo. Con esa gente que tenemos detrás hay que tener poca sangre para no sentir lo que transmiten.

-Cómo han cambiado las cosas desde aquel partido. El Sporting tiene otro entrenador y el Oviedo ha crecido mucho.

-A mí, a estas alturas, no hay nada que me sorprenda, la verdad. El fútbol da unas vueltas tremendas. Y la Segunda División es así, de una dificultad máxima y una gran igualdad. A mí si me dices ahora que el que está el 14º de la clasificación va a ascender al final de la temporada, te creo. Puede pasar perfectamente en esta categoría. Y debemos ser conscientes de que funciona así. Si nos olvidamos de esto, mal vamos. En Segunda hay que trabajar todos los días y, además, apretar cada domingo. Un resultado no te puede cambiar la forma de pensar ni de actuar porque al final el resultado es solo una consecuencia del día a día.

-¿Cuál es el derbi más caliente que ha vivido en su carrera en el fútbol?

-El asturiano, sin ninguna duda. De jugador, he disputado algunos choques entre el Elche y el Alicante y era un duelo bastante caliente, pero le supera el de aquí. Y también es más bonito. Por lo que experimenté en la primera vuelta se vive un buen ambiente y ante un campo lleno. La de El Molinón fue una experiencia inolvidable y seguro que se repetirá este domingo en el Carlos Tartiere.

-Complete la frase: si el Oviedo le gana el domingo al Sporting...

-...sumará tres puntos. No hay nada más que esa lectura. Tres puntos muy importantes, pero tres puntos al fin y al cabo. Cada uno que lo celebre como quiera, pero para mí serían tres puntos.

-¿Qué es lo que más teme de este Sporting? ¿Cuáles son sus armas?

-Del Sporting me preocupa todo. Es muy buen equipo, con potencial. Pero yo solo le pido a mi equipo que esté a su nivel, nada más.

-¿Conoce a Rubén Baraja?

- Sí, de haber jugado estas dos últimas temporadas contra sus equipos.

-¿Cuál es su mejor recuerdo en el Tartiere?

-Cada día que jugamos allí. Viendo el ambiente que se crea me gustaría ser espectador para disfrutar. El mejor recuerdo se vive cada día. Quizás si tengo que elegir un momento de la actual temporada me quedo con el partido ante la Cultural Leonesa. Fue más especial porque me iba de vacaciones de Navidad y nos fuimos tranquilos después de haber ganado 3-0 y situarnos en una posición alta en la clasificación.

-¿Qué mensaje le daría a las dos aficiones de cara al derbi del domingo?

-Sobre todo que reine la tranquilidad. Que los aficionados disfruten, cada uno con su equipo. También que usemos la cabeza, que esto al final es un partido de fútbol. Hay quien dentro de la misma familia es seguidor del Oviedo y quien es seguirdor del Sporting. ¿Por qué no podemos estar juntos? Es un partido de fútbol y tiene que ser un ejemplo a nivel nacional.

Baraja

Al Sporting de Rubén Baraja, el derbi ante el Oviedo le llega justo a tiempo. El Sporting ha restañado sus heridas, vuelve a sentirse fuerte y confiado en sus posibilidades, como si el equipo pisase de nuevo terreno firme. Al equipo le falta ahora dar un golpe de autoridad encima de la mesa y mejorar su rendimiento como visitante, que es la gran asignatura pendiente del curso. Lograr la victoria en Oviedo supondría ese paso adelante que el técnico lleva varias semanas reclamando a sus futbolistas. A la vista de las devastadores consecuencias que tuvo para el Sporting el empate concedido en la primera vuelta, es fácil proyectar el efecto que causaría una victoria en territorio enemigo tanto en la afición como en el equipo. En su dilatada carrera como futbolista, Rubén Baraja ha vivido muchos enfrentamiento de máxima rivalidad, por lo que sabe perfectamente cómo gestionar el escenario. El técnico muestra a LA NUEVA ESPAÑA sus impresiones sobre su primer gran partido en el banquillo del Sporting.

-¿Cuándo sintió la cercanía del derbi?

-Sinceramente, esta semana. Todos éramos conscientes de que este partido iba a llegar, pero me gusta disfrutarlo cuando es su momento, no antes. Ahora que ha llegado, lo afrontamos con la mayor ilusión porque es un partido único y sabemos cómo lo vive la gente en Gijón y en Asturias en general.

-Por mucha coraza con que quiso proteger al vestuario, los mensajes llevan semanas calando.

-Lógicamente es un partido especial y es algo que estamos deseando vivir. Pero hay que seguir compitiendo y el partido son tres puntos importantes y trascendentes por todo lo que significan, pero tres puntos. Estamos centrados en el corto plazo.

-¿Tiene la sensación de estar jugando dos ligas paralelas?

-Eso sí que es una realidad que tenemos que aceptar. La gente del Sporting mira al Oviedo y la gente del Oviedo mira al Sporting. Trataremos de conseguir estar por encima, pero siempre dentro de nuestros objetivos. Tenemos que centrarnos en lo que nosotros buscamos y ojalá también podamos quedar por encima del Oviedo.

-¿Cómo vive usted este tipo de partidos? ¿Es de esos a los que les va la marcha?

-Al final son tres puntos como los de cualquier otro partido, pero creo que lo viviré con pasión, como lo va a vivir la gente de Gijón. No es un partido más y lógicamente le damos la importancia que tiene y espero que el resultado sea favorable para nosotros.

-¿Conoce personalmente a Anquela?

-Sí, tuve la ocasión de hablar alguna vez con él y es un entrenador al que respeto mucho por su trabajo y por su trayectoria y estoy seguro de que nos va a poner las cosas muy difíciles.

-La presión y el ambiente de estos partidos y la forma en la que puedan afectar a determinados futbolistas, ¿puede influir en las decisiones que usted tome?

-No, sencillamente creo que los futbolistas de casa lo vivirán de una manera diferente, por esa competencia que han vivido desde pequeños.

-Desde su experiencia, ¿cuándo se empieza a jugar el derbi?

-Desde el primer minuto de esta semana ya tienes que estar preparado. En cuanto acabó el partido ante el Nàstic del pasado domingo.

-¿Cuál es el derbi más caliente que ha vivido usted en primera persona?

-Yo creo que fue uno entre el Atlético y el Real Madrid en el Calderón. También algún Valencia-Villarreal, pero la rivalidad es menor. En Valencia también viví alguno contra el Levante. Es cierto que son partidos diferentes al resto.

-Complete la siguiente frase: Si el Sporting gana en el Tartiere€

-€ habremos sumado tres puntos más y nuestros aficionados estarán tremendamente felices.

-¿Qué es lo que más teme del Oviedo?

-Solamente me centro en el Sporting.

-¿Cuál es el mejor recuerdo que tiene de sus visitas al Carlos Tartiere?

-No sabría decir. Pero el peor lo tengo claro. Fue el descenso en el viejo Tartiere con el Atlético de Madrid, que perdimos 1-0 y Hasselbaink falló un penalti. Los recuerdos que tengo del Tartiere han sido malos, la última vez que jugué allí perdí 3-0 con el Elche, así que espero darle la vuelta a mejor a esa situación.

-Un mensaje para las aficiones.

-Que haya una deportividad sana, que disfruten del derbi de la mejor manera y que los sportinguistas salgan satisfechos de lo que ha hecho su equipo en el partido.

Compartir el artículo

stats