El Liberbank Gijón sólo pudo lograr un empate ante un Porriño que se mostró como un equipo más conjuntado, ha hecho menos cambios en la plantilla que las gijonesas, y mandó en el marcador la mayor parte del partido.

El conjunto local tardó en entrar en el partido y el marcador se le puso en contra, 2-8, si bien en esos primeros minutos las gijonesas estrellaron varios balones en los postes. Diego Lafuente dio minutos a todas las jugadoras por lo que los aficionados tuvieron la oportunidad de sacar una primera impresión de las recién llegadas. Cuando logren la conjunción imposible de lograr con apenas una decena de entrenamientos da la impresión que la plantilla de esta temporada es más compacta y sin tantas diferencias de nivel como la pasada lo que permitirá mas rotaciones sin que el equipo pierda potencial. La segunda prueba será el sábado 18 cuando el Liberbank Gijón reciba en el Palacio de los Deportes al Zuazo de Barakaldo.