Por cuarto año consecutivo, el Liberbank Oviedo luchará por el ascenso a la ACB. Los carbayones se aseguraron ayer su presencia en el play-off tras una trabajada victoria en la cancha del Carramimbre Valladolid (79-85). El equipo de Javi Rodríguez se sobrepuso al parcial inicial y fue mejor en un partido trabado.
En la primera parte, el Liberbank trató de aclimatarse a la dureza física que los vallisoletanos pusieron de inicio. Los de Paco García, agresivos en defensa, llegaron a situarse con un 10-2 de parcial de inicio. El conjunto carbayón comenzó a entonarse a medida que avanzaban los minutos y, la estelar aparición de Sergio Llorente permitió a los de Javi Rodríguez finalizar el cuarto a únicamente tres puntos de distancia (20-17). El papel del base madrileño resultó determinante. De sus manos salieron once puntos consecutivos para el Liberbank. Sin embargo, a falta de medio minuto para el final del periodo, Llorente tuvo que retirarse por molestias en la planta del pie. No pudo volver a pista durante lo que restaba de encuentro.
En el segundo periodo, el Oviedo Baloncesto siguió remando y fruto de su acierto logró ponerse por delante por primera vez en el encuentro con una canasta y adicional de Oliver Arteaga cuando habían transcurrido poco más de tres minutos de cuarto. El choque entró en una fase de igualdad que se rompió en los instantes finales. Cuatro puntos seguidos de Jakstas dejaron el marcador al descanso en 40-46.
La salida del Liberbank en el tercer cuarto fue colosal. El acierto que había faltado en la primera parte, llegó. Dos triples -Geks y Rosa- y una canasta de Arteaga dejaron la ventaja en 14 puntos (40-54) para los asturianos. Pese a todo, y como sucedió a lo largo de todo el encuentro, el Carramimbre Valladolid no se rindió y en los últimos minutos del cuarto volvió a contar con opciones. El Oviedo inició los últimos diez minutos con una ventaja de cuatro puntos (58-62).
Los interiores del Liberbank cuajaron una gran segunda mitad gracias a su gran trabajo bajo los aros. Van Zegeren logró los cuatro primeros puntos en el último cuarto. Valladolid no se despegaba en el marcador. Un triple de Meana, que demostró personalidad pese a que el comportamiento sobre la cancha de Alvarado dejase mucho que desear, permitió a los carbayones volver a abrir brecha (62-69).
Los pucelanos aún no habían pronunciado su última palabra. Con una cancha que apretaba y con un arbitraje ligeramente decantado para el equipo de casa, llegaron a situarse a tres puntos (73-76) a falta de cuatro minutos. Un triple de Geks ofreció la tranquilidad necesaria para los últimos instantes. Arteaga, tras recibir una antideportiva, y dos libres del escolta letón allanaron un camino culminado con otros dos tiros desde la línea de personal anotados por el joven base Alonso Meana.
Los carbayones estarán pendientes del duelo que se disputa mañana entre Bilbao y Melilla. Momentáneamente el Liberbank es segundo y su siguiente objetivo es asegurar el factor cancha para la fase de ascenso.
