Mikel Ugarte tiene el récord de haber debutado como profesional hace quince días a la edad de 36 años con el equipo de Guinea Bissau ubicado en Pontevedra que lleva por nombre Guerciotti-Kiwi Atlántico. Pero si esto es algo fuera de lo común en el pelotón actual, también lo es que el vasco compagina el ciclismo con su trabajo profesional, ya que es conductor de tranvía en Bilbao. Ugarte solicitó una reducción de horas en su trabajo para poder entrenarse y correr algunas carreras con su equipo.

De casta le viene al galgo, ya que su padre fue profesional con el nombre de Ugarte y luego estuvo en la directiva del equipo vasco SVAC (Sociedad Vizcaína Amigos del Ciclismo) y también hizo de director deportivo.

Su hijo Mikel corrió hasta la categoría de sub-23 y luego lo dejó porque "había vivido demasiado ciclismo en su casa". Pero nueve años después se involucró tanto con la bicicleta que le hizo soñar con llegar un día a ser profesional.

Esto último lo logró hace dos semanas corriendo el Premio "Indurain" y después el Premio "Primavera" en Amorebieta. Y en la Vuelta Asturias está haciendo su primera carrera por etapas "con mucha ilusión por saber cómo me encuentro entre los grandes". Y la próxima semana también hará la Vuelta a Madrid. Su padre está siguiendo la carrera del Principado para ver el debut profesional de Mikel.