La expedición rojiblanca se ha visto obligada a hacer noche en Madrid debido a un retraso del avión desde Las Palmas por una tormenta sobre la capital, lo que hizo que el equipo perdiera el vuelo a Asturias.

Una enorme tromba de agua ha anegado la terminal T4 del Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas sorprendiendo a cientos de viajeros que esperaban la apertura de las puertas de embarque.

El agua que caía desde la techumbre ha inundado los pasillos y zonas de espera donde miles de viajeros hacen guardia diariamente hasta que su vuelo comience el embarque.

Los de José Alberto, que vienen de perder en las islas, se enfrentan el próximo domingo al Racing de Santander en El Molinón.