El Avilés, contra el novato

CAMPO suárez puerta

hora 12.00

ÁRBITRO rivas nosti

El Avilés, en su condición de histórico -adjetivo a veces usado como eufemismo de decadente- sigue siendo un club que impone cierto respeto en Tercera. Si no, que se lo digan al Vallobín, el modesto conjunto ovetense que hoy visita por primera vez el Suárez Puerta. Y como ya sucedió el año pasado con la visita del San Claudio, otro debutante por aquel entonces en Tercera, lo hace como un rival directo de los avilesinos. "Están ahí abajo por circunstancias, pero al final nos medimos el tercero por cola -el Vallobín- contra el quinto por la cola -el Avilés-", afirma Abel Pablos, el técnico visitante.

Con diez partidos de campeonato disputado, el Avilés gestionado por Norte Proyectos vive inmerso en una crisis de resultados permanente. Solo ha ganado un partido en lo que va de curso y todavía no sabe lo que es sumar de tres en tres ante la sufrida afición avilesina. Ocasión propicia hoy para romper el maleficio, ya que el Vallobín nunca ha ganado lejos de Oviedo.

"Para nosotros, jugar en el Suárez Puerta no deja de ser un premio", indica el técnico del conjunto carbayón. El Vallobín es uno de los equipos más jóvenes de la categoría. "Salvo cuatro jugadores, ninguno de los demás pasa de los 25 años", describe el míster rival del Avilés. También de los más inexpertos. "Solo tres jugadores tienen experiencia en Tercera, no como en el Avilés, que muchos de sus jugadores son bien conocidos en la categoría", asegura Pablos.

Entre esos jugadores conocidos, se cuenta Imanol, que no jugará hoy. Félix probablemente jugará en el centro del campo, acompañando a Santullano y a Annunziata, inamovible en la sala de máquinas. Pandiani, que junto a Álvaro es el único central que tiene Gálvez, jugará en su sitio. Es decir, atrás.

Precisamente la incógnita que sigue girando alrededor de Gálvez, el técnico donostiarra del Avilés, es si sentará en el banquillo. Desde el club afirman que todo está ya solucionado. Si bien, en los documentos federativos sigue sin constar que la ficha del nuevo entrenador esté dada de alta. De no poder ejercer en el banquillo, será el tercer partido seguido. Un hito.