Con un lleno hasta la bandera, Pablo Carreño se llevó la final del torneo de Luanco por 6-4 y 6-2 en una hora y 16 minutos de partido. Con una potente derecha paralela buscando la línea de fondo, un buen servicio y precisas dejadas, Carreño consiguió superar a Feliciano López. En el primer set, el gijonés rompió el servicio de su rival en el tercer juego, haciendo buena la segunda bola de break de la que dispuso merced a un drive muy ajustado, que botó en la línea y cristalizó en una ruptura de servicio que marcó un punto de inflexión en el devenir de los acontecimientos. Con ambos tenistas manteniendo su servicio, Carreño se llevó el primer set por 6-4 en 38 minutos. En el segundo set, el tenista gijonés, llevado en volandas por la grada, se impuso con facilidad por 6-2, logrando dos breaks.