Un jugador del filial del ovetense Arenas de Manzaneda de futbol sala se expone a ser sancionado de por vida tras romperle la cadera a un árbitro

Al colegiado Carlos Manuel González-Posada, que ya ha sido dado de alta, tuvieron que operarle y ponerle tornillos en la cadera

Un jugador del filial del Arenas de Manzaneda B de futbol sala se expone a ser sancionado de por vida tras romperle la cadera a un árbitro

Un jugador del filial del Arenas de Manzaneda B de futbol sala se expone a ser sancionado de por vida tras romperle la cadera a un árbitro

A. L.

"Consternados". Así describen en el club Arenas de Manzaneda el estado anímico que impera en la entidad ovetense después de que un jugador de su equipo filial, que juega en el grupo 2 Segunda Asturfutsal, empujara al árbitro Carlos Manuel González-Posada y le causara una lesión grave, de la que tuvo que ser operado para colocarle tornillos en la cadera. El equipo de Oviedo jugaba en el campo del Marina de As Figueiras, de Castropol, cuando el colegiado expulsó a un integrante del equipo visitante, Héctor B. C. Éste se dirigió hacia él y le propinó un fuerte empujón que le desplazó varios metros, provocándole un duro impacto.

El jugador ha sido suspendido cautelarmente hasta que se tome una decisión sobre la duración de la sanción que se le pueda imponer. Marco Santurio, presidente del comité técnico de árbitros de la Federación Asturiana de Fútbol, explica que el castigo puede llegar a ser a perpetuidad: "El cuadro sancionador va de mínimo un año a un máximo que puede ser a perpetuidad, depende de la gravedad de la lesión, el árbitro tiene diez días para aportar la documentación".

Marco Santurio visitó al colegiado en el Hospital de San Agustín, adonde fue trasladado desde Jarrio. "Le operaron de la cadera, tuvieron que ponerle tornillos, ahora le han dado el alta, pero tendrá un proceso de recuperación bastante largo, una baja larga en su trabajo, estará incapacitado durante un periodo largo para llevar una vida normal", explica el presidente del comité, que añade que anímicamente está bien: "Es un árbitro que tiene ya cierta edad, está bien, sorprendido por lo que sucedió pero razonablemente bien".

Santurio traslada que lo sucesos, que nadie niega, ni el propio agresor, fueron que "expulsó al jugador y por expulsarle se abalanzó sobre él, le tiró al suelo y le causó estas lesiones". Hasta el lugar de los hechos se trasladó la Guardia Civil, que tomó declaración al jugador, que no negó lo que había hecho, y que ahora ha sido expulsado por su club. El colegiado tiene mañana cita para denunciar los hechos ante la Guardia Civil. "Le brindaremos toda la asistencia jurídica que necesita al colegiado, así como todo nuestro apoyo", añade Santurio.

El presidente del comité quiso agradecer la contundencia con la que reaccionó el Arenas de Manzaneda a todos estos hechos: "Es de agradecer la reacción del club, que sean conscientes de la gravedad, han llamado, han pedido disculpas y es de agradecer porque alguna vez algún club ha negado hechos de esta naturaleza y ha acusado al árbitro, algo que es reprobable".

Y es que el Arenas de Manzaneda ha sido muy contundente y ha condenado con total claridad los hechos, expulsando al jugador del club y mostrando su apoyo al colegiado. En un comuncado público, el club ovetense dijo lo siguiente:

"Este fin de semana ha sido muy duro para la directiva. jugadores y cuerpo técnico del Arenas de Manzaneda C.D. Estamos totalmente consternados por los hechos del pasado sábado en el partido entre el Marino de As Figueiras y el Arenas de Manzaneda B, donde uno de nuestros jugadores (ya exjugador del club desde el mismo sábado) agredió, sin ninguna razón, al colegiado del partido, propinándole un empujón y derribándolo al suelo. ¡LAMENTABLE!

A través de este comunicado, queremos hacer públicas nuestras disculpas al colegiado. Desde el primer momento, hemos estado a su lado en todo lo que ha sido posible. Él sabe de primera mano que cuenta con toda nuestra colaboración en todos los sentidos. También queremos pedir disculpas al Comité de Árbitros, a la Federación Asturiana de Fútbol, al equipo rival, a nuestra afición y también a los integrantes del Arenas de Manzaneda C.D. y su base, quienes han visto manchada su imagen por este acto tan lamentable.

Desde el Arenas de Manzaneda C.D., queremos mostrar nuestro total rechazo a este tipo de acciones y consideramos que la sanción que nos imponga el Comité de Competición no hará justicia con lo ocurrido. Por ese motivo, el jugador ha sido dado de baja una vez que tuvimos constancia de esta agresión, y tomaremos las medidas legales que sean oportunas.

En el Arenas de Manzaneda C.D., tenemos una TOLERANCIA CERO hacia estas acciones. No hay ningún tipo de excusa ni defensa posible. Una persona que agrede a otra no puede permanecer ni un segundo más en el club, tal como ha sucedido".