Oviedo, L. GANCEDO

La letra menuda del nuevo precio regulado de la luz que desde hoy sustituye a la tarifa tradicional muestra que, además de la subida media general del 2 por ciento que anteayer anunció el Gobierno, hay otros cambios que atañen a las cuentas de los hogares. Algunos de los más relevantes suponen la supresión de ciertos descuentos y recargos en el recibo de la luz y, también, que los clientes que hasta ahora disponían de tarifa de discriminación horaria encajarán un encarecimiento del kilovatio notablemente mayor que los demás, de entre el 9 y el 17 por ciento.

Varias organizaciones de consumidores recibieron ayer de uñas la resolución del Ministerio de Industria que fija el precio que tendrá desde el 31 de julio y hasta final de año la denominada tarifa de último recurso (TUR), aquella a la quedarán acogidos de forma automática todos los consumidores, en su gran mayoría hogares, que opten por no contratar el suministro de luz en el mercado libre. Esto es, todos los clientes que, teniendo una potencia contratada inferior a 10 kilovatios, no se decidan a aceptar alguna de las ofertas que puedan realizar las empresas eléctricas. A dos días del arranque, hoy, del nuevo sistema, el departamento de Miguel Sebastián divulgó que el precio de la electricidad subirá con la TUR un 2 por ciento, unos 70 céntimos al mes para una familia tipo, siempre según las cuentas de Industria. Pero hay otros impactos que, en algún caso, se han apresurado a denunciar las organizaciones de usuarios.

l Fin del descuento. La configuración de la tarifa de último recurso incluye la supresión de un descuento que desde enero se aplicaba de manera generalizada a los clientes de baja tensión y que suponía que los primeros 12,5 kilovatios consumidos cada mes eran gratuitos. Al precio que acaba de fijar el Gobierno para la TUR e incluyendo los impuestos, la rebaja supondría, de no haber sido eliminada, un ahorro de unos 20 euros al año por cliente. Tal descuento, impulsado por Industria hace sólo seis meses, recibió en su momento críticas por su reducido impacto en las economías familiares. Sin embargo, su supresión ha desencadenado ahora quejas de las organizaciones de consumidores por sus efectos negativos. Así, Facua subrayó que, con esa medida, el encarecimiento real de la luz no es del 2 por ciento, sino del 6 por ciento.

l Sin recargos. Industria ha justificado el final del descuento de los 12,5 kilovatios como una medida para evitar complicaciones en la facturación que puedan entorpecer el funcionamiento del mercado libre, el desarrollo de las ofertas de las compañías eléctricas a los consumidores. La misma explicación ofreció sobre otro cambio, esta vez de signo positivo para las cuentas de una parte de los hogares, y que supone retirar los recargos que gravaban el precio del kilovatio cuando el consumo supera cierto nivel.

l Discriminación horaria. La TUR incluye dos variantes: una tarifa normal, en la que el precio del kilovatio consumido es siempre el mismo, y otra que diferencia según en que hora se produce el gasto eléctrico. Buena parte de los usuarios de este modelo son los antiguos abonados a la tarifa nocturna, que tenía unos 50.000 beneficiarios en Asturias y que fue extinguida en 2008 en medio de una fuerte polémica. Ahora, la nueva TUR con discriminación horaria incluye fuertes subidas en relación a la tarifa vigente desde enero. El encarecimiento del kilovatio llega al 17 por ciento en el horario valle (el más barato) y al 9 por ciento en el horario punta (el más caro). Aún así, indicaron fuentes gubernamentales, se estima que la tarifa de último recurso con discriminación horaria, correctamente utilizada (aprovechando al máximo las horas valle) permite un ahorro significativo respecto a la TUR convencional.

A pesar de esta última subida, la Unión de Consumidores de Asturias aconsejó ayer a los usuarios acogerse a la tarifa de discriminación horaria, que consta de 14 horas al día bonificadas y otras 10 horas al día con un incremento del coste. Según este colectivo, el ahorro para los usuarios puede llegar al 15 por ciento.