El Gobierno del PP vuelve a hacer un guiño a los funcionarios del Estado, que en "las próximas semanas" cobrarán la cuarta parte de la paga extra de navidad suprimida en 2012. El Consejo de Ministros solicitó ayer a la comisión permanente del Consejo de Estado la aprobación con carácter de urgencia de los créditos necesarios para reintegrar a los empleados públicos otro 26% de la extra -equivalente a 48 días-, lo que supondrá un gasto de más de 252 millones de euros. La medida afecta únicamente al personal de la administración del Estado, pero desde los sindicatos de trabajadores públicos de Asturias ya se ha demando al Principado y a los ayuntamientos que abran las mesas de negociación para que apliquen la misma medida.
El reintegro aprobado ayer por el Gobierno no tiene carácter de norma básica -como ocurrió con los recortes-, por lo que no obliga a todas las administraciones públicas y queda a expensas de las negociaciones en los ámbitos regional y local. Anteayer, cuando ya se esperaba el anuncio de devolución por parte del Gobierno del PP, se reunió el pleno de la junta de personal funcionario del Principado de Asturias y a petición de CC OO acordó solicitar una reunión con el director general de Función Pública para tratar la devolución de la paga extra de navidad de 2012. "El encuentro se celebrará, en principio, a finales de la próxima semana", señaló José Antonio Fernández, secretario general de la FSC-CC OO de Asturias, que espera que el Gobierno regional acepte también devolver al menos otra cuarta parte de la paga extra, lo que supondría un gasto de cerca de 20 millones de euros.
"A la hora de recortar la paga, el Principado aplicó la medida del Gobierno central de forma inmediata y esperamos que ahora haga lo mismo con la devolución", señaló Luis Ángel Ardura, secretario de Acción Sindical de FSP-UGT de Asturias, que destacó que será más difícil que todos los ayuntamientos también se sumen al reintegro de la paga puesto que muchos tienen que cumplir con los ajustes del plan de proveedores. "De todas formas solicitaremos una reunión con la Federación Asturiana de Concejos (FACC) para intentar consensuar la medida a nivel general", añadió Ardura.
De momento serán los empleados públicos del Estado los que recibirán "en las próximas semanas" otra cuarta parte de la paga extra suspendida en 2012 que se sumará a la que ya recibieron a principios de año. Quedaría la mitad, que ya está incluida en los presupuestos generales de 2016.
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, que ayer anunció la solicitud del crédito de 252 millones de euros para afrontar la devolución, prevé que la medida se pueda aprobar definitivamente en el Consejo de Ministros del próximo viernes, 11 de septiembre, para que se empiece a pagar "inmediatamente" en una "nómina separada". La vicepresidenta del Gobierno recalcó que el pago es posible "porque la evolución del déficit del Estado ha sido buena". En ese punto destacó que el saldo negativo se ha reducido en un 16% hasta julio gracias a la buena marcha de la recaudación.
Además, el Consejo de Ministros dio ayer también el visto bueno a la recuperación del quinto día de libre disposición, también llamados 'moscosos', que faltaba por devolver a los funcionarios estatales y la restitución de los permisos particulares por antigüedad, conocidos como 'canosos'.
Al hilo de estas iniciativas del Gobierno, el presidente del sindicato de funcionarios CSI-F, Miguel Borra, pidió que se devuelva a los empleados públicos la totalidad de la paga extra, no sólo el 26%, y además que se haga con rango de ley básica, para que "obligue" a todas las administraciones públicas: central, autonómica y local.
Por su parte la responsable de Administraciones Públicas del PSOE, Susana Sumelzo, denunció el "nuevo insulto de un Gobierno incapaz, prepotente y agonizante que utiliza electoralmente a los empleados públicos". Sumelzo expresó su sorpresa por que "a última hora" se devuelva a este colectivo el día libre "que también se les quitó de manera injusta mediante decreto". Para la dirigente socialista, todavía es más "cínico" apelar a la recuperación económica y "sacar pecho" de la situación y de la evolución del déficit público para devolver esta parte de la extra.
