Síguenos en redes sociales:

La siderurgia encara la negociación de su convenio

Arcelor advierte de que aún no tiene ningún pedido para 2016 y culpa a China

La empresa transmite a los sindicatos que los contratos están en el aire ante la caída de los precios y la incertidumbre económica global

Arcelor advierte de que aún no tiene ningún pedido para 2016 y culpa a China

Las plantas asturianas de Arcelor-Mittal tienen la cartera de pedidos en el aire con vistas a 2016. A dos meses de que acabe el año, los clientes habituales de la multinacional, primera empresa de la región por empleo y facturación, aún no han hecho ningún encargo porque, según transmitió la empresa a los sindicatos en una reciente reunión, están a la espera de ver cómo evolucionarán los precios durante las próximas semanas. La competencia que llega desde China está dando un fuerte meneo a la industria del acero y está provocando una importante bajada de precios de muchos productos, entre ellos algunos de los que se fabrican en las instalaciones asturianas. El país oriental está creando una gran inquietud en el mercado desde que comenzó a incrementar de forma considerable sus exportaciones para compensar la tremenda caída de su mercado interior. A esto se une, además, la incertidumbre sobre la evolución de la economía global, con el fantasma de una probable desaceleración amenazando.

En el mismo encuentro, la siderúrgica también comunicó que el arranque de los trabajos de ampliación de la acería de Avilés, la LD-III, se retrasará hasta fin de año. Lo que no dieron los directivos fueron explicaciones de por qué se va a producir esta demora de una obra que implicará un desembolso de cien millones. Los sindicatos sospechan que es por un "problema técnico".

Entre la plantilla preocupa más la sequía de llamadas para hacer encargos. "Creemos que es algo coyuntural por la incertidumbre que hay sobre China", señaló Sergio Díaz, portavoz de UGT. En la misma línea incidió José Manuel Castro, de CC OO. "Los clientes están esperando a hacer sus pedidos hasta comprobar cómo evoluciona la situación y así evitar tener mercancía almacenada. Siempre hay un bajón a finales de año, pero éste podría llegar a ocasionar problemas", auguró.

Para evidenciar la amenaza que llega desde Pekín la empresa aseguró a los sindicatos que el precio de la bobina, como la que se hace en Avilés, ha bajado en el último mes en unos 50 euros por tonelada, una caída que es consecuencia directa del fuerte incremento de las exportaciones asiáticas.

Esta información la comunicó la compañía a los sindicatos en la misma reunión en la que confirmó la promoción de José Manuel Arias como nuevo jefe de división de Arcelor-Mittal en el suroeste de Europa y la presentación de su sustituto al frente de las plantas asturianas, Oswaldo Suárez.

Algunos trabajadores han relacionado el aviso de Arcelor sobre los pedidos con una presunta estrategia ante la negociación del convenio colectivo que está previsto que se abra en las próximas semanas. La plantilla teme que la siderúrgica juegue la baza de la escasez de trabajo para intentar frenar las demandas que preparan los sindicatos, entre las que se encuentran una subida de los salarios y un incremento de las plantillas en los talleres para afrontar la nueva carga de trabajo.

Pulsa para ver más contenido para ti