La macroampliación de capital de Duro Felguera para captar 125,7 millones de euros, que son vitales para la supervivencia del grupo, con 160 años de historia, culminó ayer la primera parte del proceso con la previsión -descontada de antemano por el grupo- de suscripción incompleta de los 4.656 millones de nuevas acciones que va a emitir la sociedad.

A falta de datos definitivos oficiales, se da por hecho que la colocación proseguirá en las dos fases adicionales previstas en el proceso. En medios de la compañía se respira sosiego y tranquilidad, dijeron medios de conocedores, en la creencia de que los títulos no suscritos en la fase inicial (la de la negociación de derechos y suscripción preferente) lo serán en las dos siguientes: hoy comienza la adjudicación de los títulos sobrantes entre los minoristas que hubiesen cursado peticiones de compra superiores a las que tenían opción (97 acciones nuevas por cada 3 derechos generados por otras tantas acciones antiguas) y se intuye que los grandes inversores institucionales y cualificados se reserven para la tercera y última fase, consistente en una colocación rápida directa y discrecional de títulos sobrantes, lo que ocurriría -de darse esta circunstancia, como es muy probable- entre las 17 horas del día 23 y las 9 horas del 24.

Los derechos de suscripción preferente de nuevos títulos permanecieron ayer estables en 0,01 euros por título (igual que la víspera por el colapso de órdenes de venta que no pudieron cruzarse), y acumularon una depreciación del 92% respecto a los 0,125 euros de su precio inicial del día 3. En estos quince días se negociaron más de 177,46 millones de derechos, cuando sólo existían 144 millones, lo que evidencia que hubo especulación, con compra y reventa sucesivas por parte de algunos inversores.

Otro tanto ocurrió con las acciones, aunque su comportamiento fue el inverso, con una tendencia alcista. Las viejas acciones de Duro (en los últimos diez días se movieron más de 177,46 millones, el 132% de las existentes), comenzaron la ampliación el día 3 a 0,045 euros (la víspera, antes de que se disociaran de sus derechos, se negociaron a 0,228) y cerraron ayer en 0,18 euros, con una remontada del 300%. Los días 10 y 11 llegaron a valer 0,29 euros, el 544% más que el día 3. Los 144 millones de acciones viejas (que ahora representan el 100% del capital social de la compañía y que pasarán a a suponer el 3% cuando acabe la ampliación) culminaron la jornada de ayer a un precio (0,18 euros) que es el 566,6% superior a los 0,027 euros al que se emiten (valor nominal más prima de emisión) los 4.656 millones de nuevos títulos. Existe la creencia en la sociedad de que el mercado está descontando el valor futuro de Duro, en la expectativa de que la sociedad salga bien de este proceso y remonte el vuelo.