UGT urge la intervención pública del sector ante "el desmán de las eléctricas"

"Creo que el desmán en el que vivimos por parte de las compañías eléctricas requiere una intervención eléctrica por parte del Gobierno y del Parlamento y de los grupos políticos; no se puede dejar sólo al Gobierno, tienen que arrimar el hombro el conjunto de las fuerzas políticas, porque estamos ante una emergencia". El alza de los precios de la luz, en máximos de la última década, y el anuncio de cierre de alguna térmica, llevó ayer al secretario general de UGT, el asturiano Pepe Álvarez, a pronunciarse así en un acto de UGT, en Gijón.

"Es una verdadera vergüenza que la luz en nuestro país haya subido casi un 25%. No hay ninguna razón para que eso sea así. Bueno, sí que hay una, que las empresas eléctricas se pasan por el forro las indicaciones, las obligaciones que tienen con la sociedad a la que están sirviendo y en ese sentido el Gobierno tiene que tomar medidas drásticas", señaló Pepe Álvarez, quien agregó que "hay que acabar con estos beneficios absolutamente escandalosos, indecentes, que tienen las eléctricas a cuenta de los consumidores de energía de nuestro país; necesitamos que el sector público regule todo el tema de la energía de manera drástica", insistiendo en que la intervención es urgente dado que nos encaminamos hacia el invierno y que un incremento del 25% en el precio de la luz no puede asumirse "en una sociedad en la que hay en torno a 6 millones de personas que ganan menos de 850 euros al mes", ante lo que urge "cambiar las reglas del juego".

El dirigente sindical achacó los abultados precios de la energía entre otras cosas a que España carece, al contrario que Francia, Alemania o Italia, de una empresa eléctrica pública "de referencia", tras haber privatizado Endesa. El máximo responsable de UGT apuntó al respecto que "estos errores hay que subsanarlos" con la entrada del sector público en el capital de alguna empresa del sector "y con una regulación muy estricta que nos permita superar esta situación increíble: Un año de lluvias como el que hemos tenido, con los embalses llenos y resulta que el precio de la energía se continúa disparando".

Respecto al cierre de térmicas, que ya se ha anunciado en el caso de la de Lada, apuntó que "las eléctricas lo están deseando, porque se les ha dejado un sistema que es un chollo para ellos. A ellos lo que les interesa es la comercialización, el precio de la producción les es igual, por la manera de construir". Las térmicas son viables y el Gobierno debe obligar a las eléctricas a invertir en su modernización en lugar de repartir "tantos dividendos con los accionistas".

Álvarez apuntó que ya le pidió a la ministra Teresa Ribera una "transición justa" en el sector porque "nos jugamos la industria y nos jugamos el precio al consumidor", no sólo en Asturias, sino en toda España. Esa transición debe llevar aparejada una reindustrialización de las comarcas afectas.

Respecto a la minería del carbón, Pepe Álvarez señaló que le ha trasladado tanto a las ministra Teresa Ribera como al presidente Pedro Sánchez que no es necesario cerrar las minas a finales de 2018. Se pregunta por qué en España se ha puesto ese plazo cuando, según su versión, Alemania se plantea un horizonte de 2050 para parte de sus explotaciones.