La industria naval es un flotador para la economía del Occidente de Asturias, pero sus astilleros, con picos de empleo que superan el millar de trabajadores, se encuentran con serias dificultades para encontrar personal formado en su área de influencia. Gondán y Armón, dos de los principales astilleros privados de España, demandan, sobre todo, soldadores y caldereros, pero ninguno de los centros de FP del Occidente de Asturias ofrece esos ciclos. Empresas y centros de formación navegan por separado, un ejemplo de la desconexión que ha denunciado la FADE.
"Al final tenemos que formar nosotros a los trabajadores o traerlos de fuera de Asturias porque los centros de FP están metidos en un traje de hormigón burocrático que les impide tener flexibilidad para atender nuestras demandas", señaló Álvaro Platero, presidente de Gondán. Este astillero, con instalaciones en las zonas portuarias de Figueras (Castropol) y Vegadeo y talleres en el polígono de Barres trata de contratar a personal de la zona. "Somos conscientes de que estamos en el córner de Asturias y que no todo el mundo se adapta a vivir lejos de los grandes núcleos de la región. Por eso tratamos de contratar a gente de la zona porque nos garantiza continuidad, pero nos cuesta muchísimo encontrar a personas con formación en soldadura o en calderería, y ya no digo en fabricación con fibra, y los intentos para que los centros de la zona ofrezcan esa formación siempre han sido inútiles", apuntó Platero, que dirige una empresa que en los últimos años ha mantenido un media de 350 trabajadores pero que ha tenido picos de 800 en los momentos de mayor carga de trabajo.
"Nosotros tenemos el mismo problema", corrobora por su parte Laudelino Alperi, consejero delegado de Armón, que tiene su sede y astillero en Navia y en el Occidente de Asturias también cuenta con talleres en Puerto de Vega (Navia) y Jarrio (Coaña).
Tanto Gondán como Armón han pedido colaboración para que los centros de formación del Occidente impartan ciclos relacionados con la actividad, pero no lo han conseguido. La oferta de los IES Elisa y Luis Villamil de Vegadeo, Marqués de Casariego de Tapia, Galileo Galilei de Navia, Carmen y Severo Ochoa de Luarca, Cangas del Narcea y Concejo de Tineo, formada por 17 ciclos de grado medio y superior, no incluye ninguno de soldadura y calderería ni otros vinculados a la construcción naval. Avilés es la localidad asturiana más cercana donde se forma a caldereros y soldadores. Está a 75 kilómetros de Navia y a más de 100 de Castropol. "A nosotros nos gustaría sumarnos a la FP dual, pero no podemos esperar que un alumno vaya a clase a Avilés y al centro de trabajo en Castropol", señaló Platero, que destacó que en varias ocasiones intentó que en el IES de Vegadeo, donde se imparte un ciclo formativo del automóvil (Carrocería), se ofrezca formación vinculada a la construcción naval. "Nosotros aportábamos profesores, pero ni así lo conseguimos porque nos decían que no tenían la acreditación necesaria y quienes la tienen carecen de conocimientos en el sector naval, es un muro con el que nos golpeamos una y otra vez", señaló Platero.
"Somos conscientes de esa necesidad formativa y nos consta que en la Consejería de Educación hay voluntad de responder a esa demanda", apuntó el director del IES de Vegadeo, Javier Santos, que, no obstante, reconoció que hasta ahora no se ha logrado llenar ese vacío. "Implantar un nuevo ciclo formativo es difícil porque requiere de una importante inversión, pero la idea es tratar de adaptar el que tenemos de Carrocería del Automóvil para satisfacer en parte esa demanda formativa, que si esos ciclos de soldadura y calderería incluyen diez competencias profesionales podamos cubrir unas ocho", señaló Santos, que afirmó que junto a Gondán también se intentó implantar un certificado de profesionalidad (formación inferior a los ciclos) en construcción y reparación de barcos de fibra pero surgieron "problemas organizativos que esperamos superar de cara a próximos cursos". Principalmente faltaban profesores. "Nosotros poníamos instalaciones y parte del personal, y ellos aportaban los profesores para las competencias más especializadas, pero el problema era que esos especialistas no tienen la acreditación necesaria para impartir formación", señala Santos.
Ante esa situación, Gondán se vio obligada a buscar alternativas. "Tenemos que asumir la formación en soldadura y calderería, lo que nos cuesta tiempo, esfuerzo y dinero, y en cuanto a los especialistas que necesitábamos para nuestra división de barcos de fibra los tuvimos que traer de Vigo porque la desconexión con los centros de FP del Occidente de Asturias es total", afirmó Platero, que lamentó que "en Asturias seamos tan zotes de no aprovechar los abundantes fondos europeos que hay para formación".
