La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha alertado sobre prácticas irregulares de empresas comercializadoras de electricidad como rescindir de manera unilateral los contratos de mercado libre o subir los precios por encima de lo pactado, para evitar el impacto en sus márgenes de beneficio del encarecimiento que la luz ha registrado en el mercado mayorista, particularmente durante 2018.

Un informe conocido ayer habla genéricamente de "varios comercializadores", sin precisar sus nombres, y describe comportamientos como los que se explican en los siguientes puntos.

Rescisión. Según el aviso de la CNMC, hay empresas que "están rescindiendo o modificando los contratos con sus clientes sin mantener las condiciones inicialmente pactadas con ellos". Las energéticas invocan para ello la existencia de cláusulas que presumiblemente habilitan a los comercializadores a modificar las condiciones del contrato en cualquier momento a condición de que se haga un preaviso al cliente ofreciéndole la posibilidad de poner fin a la relación". La CNMC cuestiona la legalidad de esa práctica y subraya, en base a normas europeas y nacionales, que "los contratos con consumidores de baja tensión no pueden ser rescindidos por el comercializador antes de la finalización del plazo del primer año o de la finalización de sus prórrogas, también anuales".

Los precios. Competencia ha constatado también que algunas compañías, a pesar de pactar precios fijos con sus clientes, han cambiado los contratos para referenciar el precio a las variaciones del mercado mayorista. Otros han llegado a imponer subidas del 20% y del 30% en el precio de la energía consumida.