Las negociaciones entre la dirección y los sindicatos de Nissan en Barcelona para acordar la reducción de 600 empleos planteada por la empresa se han roto esta madrugada de manera abrupta y la multinacional estudia ahora las medidas a tomar, sin descartar ningún escenario.

Fuentes de la empresa explicaron que las conversaciones, en las que mediaba la Generalitat de Cataluña, se han cerrado sin acuerdo, pese a que se había avanzado en puntos respondiendo a las demandas de los sindicatos, por lo que la situación ahora es de "mucha incertidumbre" ante "la irresponsabilidad" del comité.

La dirección de Nissan aceptó hace unos días aplazar la presentación formal de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) para dar más margen a la negociación con los sindicatos, que ahora ha fracasado tras una reunión maratoniana de 17 horas. De momento, Nissan Motor Ibérica ha decidido informar de la situación a la dirección de la multinacional nipona "para que tome las decisiones que considere oportunas", según el comunicado hecho público este viernes.

La compañía han señalado que "están abiertas todas las posibilidades", lo que podría pasar por la presentación de un ERE con condiciones por debajo de las que se estaban negociando u otras medidas más traumáticas.