El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, aseguró ayer sobre la presunta relación de la compañía con empresas del excomisario José Manuel Villarejo que "la cúpula" de su grupo "no se dedica a espiar a nadie". Galán defendió en la Cadena Cope que Iberdrola tiene un sistema de gobierno corporativo y de cumplimiento "muy sólido" y que, tras conocerse las informaciones sobre el presunto espionaje que el comisario jubilado y en prisión provisional habría perpetrado en diferentes ocasiones por encargo de la energética a Florentino Pérez, presidente de la constructora ACS, se abrió una investigación con medios internos y externos en la que "no se ha encontrado nada que no se adapte a la ley". Sánchez Galán reiteró su deseo de que exista en esta causa judicial "la máxima transparencia".