La multinacional austriaca RHI Magnesita presentó esta mañana un ambicioso plan para ampliar su negocio en Asturias. Desde hace ya unos años la compañía tiene una unas oficinas en Oviedo (ubicadas en el polígono Espíritu Santo) que ahora pretende potenciar y convertir para referencia de un grupo, dedicado a la fabricación de productos refractarios, con la contratación de 200 nuevos empleados que se unirán a los 120 que ya tiene en la región.

El anuncio lo hicieron el consejero delegado de la compañía, Stefan Borgas, y el consejero de Industria, Enrique Fernández, en las oficinas de la empresa y que ocupan un edificio de tres plantas del área industrial ovetense, y que resaltaron que el objetivo es el de convertir a Asturias en la sede de su centro de operaciones con clientes, con las plantas productivas -tiene 35 repartidas por el mundo- o con la logística, por ejemplo. ¿Qué perfiles va a buscar la empresa? De todo. Pero primera aquellos que tengan una altísima cualificación.

Necesitarán expertos en logística, en administración, en finanzas, en asesoramiento legal... y un larguísimo etcétera. Pero habrá una serie de requisitos. Por ejemplo, saber idiomas será esencial. A poder ser más de uno. Aún habrá más, a no muy tardar estiman que van a precisar nuevos perfiles profesionales que ahora mismo ni si quiera existen. Por eso, Borgas aseguró que se van a estrechar las relaciones con la Universidad de Oviedo para conseguir modelar estos perfiles.

Con esa idea, los directivos de la multinacional, que esta mañana se reunieron en sus oficinas de Oviedo, van a poner en marcha un centro global de excelencia profesional en el que, junto a la Universidad de Oviedo, van a tratar de perfilar esos empleos del futuro.

Borgas aseguró que estamos buscando empleados altamente cualificados: "No somos un call center".