Thyssenkrupp Elevator ya ha instalado en más de medio centenar de ascensores de Europa el sistema de llamada sin contacto desarrollado en la fábrica de escaleras mecánicas y pasillos rodantes que la multinacional tiene en Mieres.

En el contexto de la pandemia de covid-19, Thyssenkrupp Elevator pretende facilitar la movilidad segura. En el caso de los ascensores, eso significa, entre otras cosas, permitir el control sin contacto con los pulsadores de la cabina por parte de los pasajeros para garantizar los estándares de higiene. Fue así como surgió la llamada sin contacto, basada en una tecnología que utiliza códigos QR, que son colocados en cada rellano y dentro de la cabina para que puedan ser leídos por los teléfonos móviles de los usuarios. Los pasajeros pueden usarlos para operar el ascensor a través de un panel de control virtual en su teléfono inteligente sin tener que tocar ningún botón durante el viaje. Según fuentes de Thyssenkrupp Elevator, ya hay más de 50 ascensores en Europa conectados con esta solución.

La pulsación de la llamada del ascensor sin contacto requiere de un servidor local, un controlador que conecta la maniobra con la plataforma en la nube y un router 4G para establecer la conexión a internet. La aplicación está íntegramente desarrollada en España. Participaron la planta de Thyssenkrupp Norte en Mieres junto con el centro de excelencia que la multinacional tiene en Madrid y el grupo de telecomunicaciones Esentis.

"El desarrollo de tecnologías sin contacto es uno de los pilares clave de Thyssenkrupp Elevator para ayudar a mantener condiciones higiénicas para los pasajeros que utilizan nuestros productos, incluso más allá de la pandemia", señaló Peter Walker, director ejecutivo de Thyssenkrupp Elevator, que añadió que "estas soluciones digitales se pueden aplicar fácilmente en una amplia variedad de segmentos, que incluyen oficinas, hoteles, hospitales y edificios residenciales".