Duro Felguera está en una situación “límite” y “crítica”, “el tiempo se agota” para una empresa con 163 años y 1.187 empleados, y la “preocupación” en la plantilla “por la continuidad” del grupo “es absoluta”. Los dirigentes regionales de las federaciones de industria de CC OO, Damián Manzano, y de UGT, Jenaro Martínez, alertaron ayer de la extrema debilidad de la multinacional, hicieron un llamamiento “a la responsabilidad” y reclamaron una intervención con “urgencia” de la dirección de la compañía, el Gobierno de la nación y el ejecutivo del Principado para evitar el desastre: “No mantener la compañía y su empleo sería catastrófico”, dijeron.

Los dirigentes de industria de CC OO y UGT, acompañados por delegados de personal de ambos sindicatos en la empresa, anunciaron movilizaciones para reclamar “una solución urgente”. La primera será una concentración ante la sede del grupo el día 23.

Los sindicatos se dirigirán a la empresa, a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) y al Principado para reclamar una acción “coordinada”, en la que todos “remen en la misma dirección”, y demandan a la empresa un “plan B” por si no se produjese el rescate temporal del grupo por la SEPI, como ha pedido la ingeniería al fondo del Gobierno para auxiliar a empresas dañadas por la Covid.

CC OO y UGT consideran que, además de la opción de la SEPI, se debe trabajar en la captación de inversores. Y que ambas no deben ser opciones excluyentes: la empresa opta por la SEPI y el Principado por la entrada de socios industriales, indicó CC OO. “La alternativa a la SEPI no puede ser el concurso de acreedores porque eso sería “dramático” y “catastrófico”, indicaron las dos organizaciones sindicales. Manzano y Martínez emplazaron al consejo de Duro a prescindir de “intereses particulares”. “La situación está tan enquistada que nos sabemos si la entrada de un inversor ha llegado a ser considerada de modo firme por el consejo”, señaló Martínez. Manzano indicó que “tras gastar dinero en contratar consultoras para buscar socios industriales, la empresa nos dijo que no veía necesaria ahora la incorporación de una inversor”. Los sindicatos reclaman un “cambio radical en la gestión”.

Otro grupo de representantes laborales de Duro se entrevistó con diputados nacionales de PSOE (Alejandro Soler y Cristina López) y Unidas Podemos (Sofía Castañón) y reclamaron la urgente entrada de la SEPI en la empresa. Soler se comprometió a pedir una entrevista con la SEPI. El consejo de ministros tampoco tomó ayer una decisión sobre la petición de Duro para su rescate.