La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha autorizado esta tarde la fusión de Unicaja Banco y Liberbank al no apreciar que la operación entrañe concentración de mercado excesiva ni posición de dominio salvo en Cáceres. El organismo, que vela por la libre concurrencia, ha impuesto condiciones muy livianas y asumibles por los dos bancos, dado que son las mismas que ambos propusieron a la CNMC para que les aprobara la integración.
Para proteger a los clientes de Liberbank, Competencia impone al banco resultante (que tendrá mayoría accionarial del actual Unicaja) que durante año y medio no podrá empeorar las condiciones contractuales que tengan pactadas los usuarios del banco de origen asturiano sin comunicárselo previamente, y además deberá ofrecerles durante ese periodo productos equiparables, o mejores a los que ya tengan.
En el caso de la provincia de Cáceres, donde se da una alta concentración de oficinas de las dos entidades, Competencia impone que durante tres años la entidad resultante (Unicaja Banco) deberá ofrecer condiciones equiparables a las mejores que esté comercializando el grupo en los territorios en los que se enfrente a una mayor competencia de otros operadores.
La autorización de la CNMC es un último gran escollo para la fusión. Aunque aún está pendiente la decisión de la ministra de Economía, Nadia Calviño, se presupone que será afirmativa, una vez que la operación tiene el respaldo de los organismos supervisores y reguladores y dado que tanto el Ministerio como el Banco de España y el Banco Central Europeo se han manifestado favorables a reforzar los bancos y consolidar el sector.