El mecanismo del prepack concursal, utilizado para la transmisión de la unidad productiva de Hijos de J. Barreras y aplicado por primera vez en Galicia, tiene como objeto una rápida resolución de continuidad para empresas en quiebra. El guion se está cumpliendo. El juzgado de lo Mercantil número 3 de Pontevedra, con sede en Vigo, ya autorizó la venta a Grupo Armón, que se subrogará 20 de los 130 trabajadores de la compañía (9 están en excedencia voluntaria). Y ha admitido ya a trámite la solicitud presentada por la propiedad del astillero para el expediente de regulación de empleo (ERE) extintivo. La magistrada Amelia Pérez acaba de autorizar la apertura del periodo de consultas.
Barreras, que irá a liquidación como sociedad anónima, ha justificado el ERE por causas económicas y productivas. “En los cuatro primeros meses del ejercicio 2022 la empresa ha generado unas pérdidas derivadas, en gran medida de la carga laboral existente, que asciende a 2.211.084,10 euros”, consta en el documento. El patrimonio neto de la empresa es negativo en más de 23,7 millones de euros. Frente a unos ingresos de 800.000 euros en este periodo, principalmente derivados de los trabajos que parte de la plantilla está realizando en Santander para los todavía dueños del astillero, Cruise Yacht (Ritz-Carlton Yacht Collection), los gastos han superado los 1,4 millones. Esta documentación refleja, eso sí, un importante aumento de la facturación en 2021 respecto al ejercicio anterior, hasta los 43,2 millones de euros, gracias a los pagos por la entrega anticipada del crucero Evrima.
“Existe un excedente en la plantilla que justifica la extinción solicitada como único medio de mantener parte de la producción”, abunda la memoria entregada por Hijos de J. Barreras. Los 20 trabajadores que se subrogará Armón serán seleccionados a través de “pruebas teóricas o prácticas y entrevistas personalizadas”, y se realizará “en el plazo de siete días desde la puesta a disposición de una lista abierta de los trabajadores”.
