Los accionistas de Unicaja Banco respaldan a Isidro Rubiales

La única vacante del consejo se cubrirá con un independiente, lo que complica que la Fundación Cajastur mantenga su vocal el año próximo

La junta general extraordinaria de accionistas de Unicaja Banco respaldó ayer la nueva etapa y modelo de gobernanza de la entidad financiera malagueña con la ratificación, con el 97,4% de los votos emitidos, del directivo Isidro Rubiales como nuevo consejero delegado en sustitución del asturiano Manuel Menéndez. Rubiales había sido nombrado por el consejo de administración el 29 de septiembre.

La asamblea también ratificó a los cuatro consejeros independientes designados por el consejo (Nuria Aliño, Antonio Carrascosa, Rocío Fernández e Inés Guzmán) para cubrir otras tantas vacantes suscitadas este año en plena batalla entre los sectores malagueño y asturiano: dos se produjeron por la destitución por la junta general ordinaria del 31 de marzo de los vocales independientes IsidOro Unda y Maite Costa por ser considerados afines a Menéndez y las otras dos por la renuncia de los consejeros independientes María Garaña y Jorge Delclaux, ambos procedentes del banco asturiano Liberbank, fusionado con Unicaja en 2021.

La junta general de ayer decidió mantener temporalmente vacante el único puesto que permanece sin cubrir en el consejo tras la renuncia del fondo de inversión Oceanwood, que, también procedente de Liberbank, vendió sus títulos tras el cese de Menéndez. El puesto, hasta ahora ocupado por un accionista de referencia, será cubierto con un nuevo vocal independiente, según aprobó la junta general, y que ya está en proceso de selección.

De este modo, los vocales independientes pasarán a ser siete sobre un total de quince, lo que complica la continuidad a partir del año próximo del representante de la Fundación Bancaria Cajastur en el máximo órgano de administración del banco si, como se presume, el inversor murciano afincado en Málaga Tomás Olivo hace valer su superioridad accionarial para reclamar su incorporación al consejo cuando venza el actual mandato de la fundación asturiana, representada por Felipe Fernández. Olivo declara tener el 9,015% mientras que Cajastur es el accionista presente en el consejo con menor peso: posee el 6,56%.

El presidente de Unicaja Banco, Manuel Azuaga, definió como "un proceso complejo y difícil" el tránsito que ha vivido el banco con el replanteamiento del modelo de fusión y las tensiones vividas, y proclamó la voluntad de seguir adelante con "un proyecto empresarial autónomo, independiente y diferencial, capaz de fijar su propia hoja de ruta" –con lo que descartó las especulaciones sobre nuevas fusiones–, y que "persigue dinamizar la actividad comercial y continuar con la vinculación con los territorios", en particular "los de origen", caso de Asturias desde 2021.

Los sindicatos, que participaron en tanto que accionistas, apoyaron los nombramientos, pero votaron en contra de la mejora remunerativa del consejo –que Azuaga estimó en el 10%– mientras no se mejore, dijeron, la situación de la plantilla.

Mientras se celebraba la junta general de accionistas, las organizaciones sindicales protestaron por segundo día ante la sede de Unicaja Banco. Varios de sus representantes reclamaron en sus intervenciones ante los accionistas la mejora del clima laboral y de la política retributiva, reducción de la presión comercial y de la sobrecarga de trabajo, y dotar con más personal los centros de trabajo.

Rubiales mantuvo su "oferta de negociación" a los sindicatos y anunció que "está en vías de solución" la sustitución de la cartelería de Liberbank por la de Unicaja en toda la red de oficinas en España.

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