Un informe constata la desventaja del acero europeo por los costes energéticos

Crédito y Caución prevé una recuperación "lenta" del sector en el segundo semestre, aunque retrocederá el 0,5% en el ejercicio | Las siderúrgicas que aceleren su transición energética competirán con ventaja, dice el dictamen

Panorámica de la factoría de ArcelorMittal en Veriña (Gijón).

Panorámica de la factoría de ArcelorMittal en Veriña (Gijón). / Ángel González

La producción de metales básicos se contraerá el 0,5% en el conjunto del año en la UE, aunque es previsible que emprenderá una lenta recuperación a partir del segundo semestre para afrontar un crecimiento del 3,4% en el ejercicio próximo, según una nota informativa que sobre el comportamiento del sector siderúrgico y metalúrgico ha elaborado la compañía Crédito y Caución, especializada en seguros de crédito interior y a la exportación. La actividad, señala el estudio, debería repuntar "lentamente" en el conjunto de los mercados avanzados en el segundo semestre "si se confirma la recuperación gradual de la demanda industrial y la disminución de las presiones sobre los costes"

Este pronóstico se alinea con el que difundió en abril la patronal mundial del acero (Worldsteel), que apunta al mantenimiento de la actividad siderúrgica este año en la UE y a un relanzamiento en 2025.

La patronal europea del sector (Eurofer) es algo más optimista, al igual que ArcelorMittal. Eurofer aventuró a comienzos de este mes un incremento de la demanda aparente de acero este año en Europa del 3,2% (tras un desplome del 9% en 2023) mientras que el consejero delegado de la multinacional, Aditya Mittal, pronosticó una mejora entre el 3% y el 4% en este ejercicio para el conjunto de los mercados excluida China. Unesid, la patronal siderúrgica española, advirtió en abril "una mejoría en algunas cifras de actividad" desde comienzos del año, por lo que los datos disponibles "invitan", dijo, "al optimismo".

Estos presagios apuntan, aun en el peor de los supuestos, a un año en el que ya no se prevén retrocesos severos, y esto es relevante cuando ArcelorMittal tiene pendiente de decidir este verano si para o no uno de los dos hornos altos de Asturias.

La caída del 0,5% que prevé Crédito y Caución en la UE (frente a la merma del 2,1% en 2023) lo atribuye a "la fragilidad del crecimiento económico, los elevados tipos de interés, la debilidad de la demanda exterior y la recesión industrial". Y agrega que, a pesar del descenso de los precios del gas, la metalurgia y siderurgia de la eurozona "se enfrentan" a "una desventaja competitiva estructural frente a otros países en términos de costes energéticos".

Este diferencial de costes mantiene paralizadas las inversiones de ArcelorMittal para reemplazar sus hornos altos mediante hornos DRI alimentados por hidrógeno verde en Gijón, Dunkerque, Gante, Hamburgo, Bremen y Eisenhüttenstadt. Por el contrario, la siderúrgica ya está ejecutando en Asturias la sustitución de la actual acería convencional gijonesa por el futuro horno eléctrico híbrido para la producción de acero verde a partir de chatarra y DRI extracomunitario. Crédito y Caución apunta al carácter estratégico de estas inversiones, dado que una de las "fortalezas del sector en el medio plazo" será, dice, "el crecimiento de la demanda de metales y acero ecológicos, sobre todo por parte de la industria automovilística y los fabricantes de turbinas eólicas", lo que "implica que los productores ecológicos pueden obtener una ventaja competitiva sobre los fabricantes que sean más lentos en la transición". No obstante, el tránsito hacia las energías limpias también entraña un desafío, alerta la nota, porque "supondrá una elevada intensidad de capital y un incremento de los costes", "especialmente para las pequeñas y medianas empresas".

Otros riesgos latentes en el sector del acero "están relacionados con el exceso de capacidad y la seguridad del suministro". "Históricamente", explica, "el sector siderúrgico se ha considerado vital para los intereses nacionales, por lo que se ha fomentado y protegido la producción nacional". "En el contexto de la globalización se registra un exceso claro de capacidad, del que China es el mayor contribuyente, pero también nuevos desafíos para asegurar la cadena de valor y evitar déficits de abastecimiento", agrega.

Para el año próximo "el sector", señala la aseguradora, "debería beneficiarse de los cambios previstos en las políticas monetarias" –si se materializan los primeros recortes de los tipos de interés que pretenden llevar a cabo los bancos centrales– y también debería verse favorecido por "el fin de ciclo de reducción de existencias".

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