La ley vasca de reconocimiento y reparación de las víctimas de abusos policiales cometidos entre 1978 y 1999 entra hoy en vigor a pesar de que el Ministerio de Interior considera que algunos de los aportados vulneran la Constitución. El Parlamento Vasco aprobó la norma con los votos de PNV y PSE-EE, la abstención de EH Bildu y el rechazo de PP y UPyD. La ley es la continuación del camino emprendido en 2012 por el Gobierno Vasco para atender a las víctimas de violaciones de derechos humanos que no habían sido reconocidas ni reparadas.