Acuerdo de gobierno

Ada Colau rechaza ser ministra y pide a Collboni pactar ya el gobierno de Barcelona

Se ha mostrado "preocupada" y "decepcionada" por la falta de determinación que achaca al socialista tras el gesto de "generosidad" que hizo su partido para que fuera alcalde

Ada Colau.

Ada Colau. / EP

Sara González

Con el acuerdo de investidura entre el PSOE y Sumar aún humeante y a pesar de que el pacto está aún a expensas del voto del soberanismo catalán, vasco y gallego, se disparan las quinielas sobre los ministrables con el nombre de Ada Colau siempre subrayado. Sin embargo, la exalcaldesa de Barcelona y líder de los Comuns, la primera voz en celebrar el pacto para reeditar la coalición en la Moncloa, ha vuelto a insistir en que ella no quiere ser ministra pese a reconocer que existe "presión ambiental". Lo ha dicho en una entrevista en el programa Cafè d'Idees de Ràdio 4 y La 2, en la que ha insistido en que su prioridad es que la entente alcanzada entre Pedro Sánchez y Yolanda Díaz se emule también en el Ayuntamiento de Barcelona con un pacto del PSC con Comuns y ERC.

"Jaume Collboni, o tiene un empacho de poder o está preparando el terreno para un pacto con Junts", ha espetado Colau. Tras loar el rol de Díaz a la hora de arrancar compromisos al PSOE en materia laboral y social que esbocen una nueva legislatura de "avances", ha advertido de que esa es la senda que el alcalde del PSC debe seguir ahora en la capital catalana, donde el gobierno municipal ha topado por ahora con el muro de la oposición para impulsar los presupuestos. "No queremos sillas, queremos un acuerdo a tres", ha subrayado la líder de los Comuns sin mojarse en si los republicanos deberían formar o no parte del gobierno.

Sí que ha precisado que no es suficiente un pacto de Barcelona en Comú con los socialistas porque hay que garantizar una mayoría de 21 ediles para que el mandato no embarranque. No obstante, se ha mostrado "preocupada" y "decepcionada" por la falta de determinación que achaca a Collboni tras el gesto de "generosidad" que hizo su partido para que fuera alcalde. "Ha perdido el mundo de vista, no se puede gobernar Barcelona solo con 10 concejales", ha insistido, aunque también ha añadido que en estos momentos es un hándicap que ERC esté inmersa en la renovación de su dirección barcelonesa.

Su empeño, ha dicho por activa y por pasiva, es tejer ese pacto de izquierdas a tres, por ello ha hecho hincapié en que no forma parte de sus planes dar el salto a la Moncloa. Sin embargo, ha dejado caer que ahora hay que centrar esfuerzos en sumar al resto de actores necesarios para la investidura y que, en todo caso, ya llegará el momento de hablar de cargos y carteras. "Yo puedo estar apoyando sin necesidad de ser ministra", asegura.

Lo que sí ha hecho Colau es apretar las tuercas a Podemos para que cierre filas con Sumar, ante el riesgo de que los mrados tachen el acuerdo de insuficiente y amaguen con desmarcarse. "Podemos ha firmado un acuerdo con Sumar para ir juntos a las elecciones y debe cumplir, o no tendrá retorno en materia económica", ha afirmado. Una manera de advertir de que si se desmarcan del pacto de investidura, se dará por roto los compromisos económicos y de representación alcanzados por ambas partes. "Con todo el afecto por Ione Belarra y lo que significa Podemos, estamos haciendo política para la gente y no para los partidos", ha sentenciado, además de pedir que no se dé más gasolina a "peleas por cuotas de protagonismo".