Feijóo pide el voto para frenar el referéndum: "Somos la alternativa al independentismo del PSC"

Proyectarse como el partido anti-referéndum, el del constitucionalismo "sin trampa ni cartón" que no hace concesiones a los independentistas. Este es el mensaje que exprime el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, para que los populares alcen el vuelo con Alejandro Fernández en Cataluña, una contienda en la que ha dejado claro que buscará el cuerpo a cuerpo con el PSC porque entiende que un buen resultado el 12 de mayo es el primer paso para tumbar a Pedro Sánchez. El espantajo que agita está claro: si los socialistas han concedido la amnistía, ¿quién garantizar que no hagan lo mismo con una votación sobre la independencia? "Somos la alternativa ante el proyecto compartido entre Junts, ERC y el PSC", ha proclamado Feijóo, que ha puesto el partido de Salvador Illa en el mismo saco que el de Carles Puigdemont y Pere Aragonès.

Que el PP pone toda la carne en el asador en estos comicios lo evidencia el hecho de que esta sea la segunda vez en una semana que Feijóo se planta en Barcelona para catapultar a sus candidatos. Los populares alimentan la expectativa de que las elecciones catalanas pueden ser el principio del fin de Sánchez, a quien acusan de estar en la Moncloa a costa de estar "chantajeado" por el independentismo catalán y vasco. Consciente de que hay una parte del electorado del PSC que no comulga con la concesión de la amnistía, que ha tachado como "la mayor cacicada en 45 años", ha señalado que hay un independentismo "oficial", el de ERC y Junts, y otro que "compadrea" con él. "Da igual votar a los independentistas que al PSC o a los Comuns: todos son socios de Sánchez", ha espetado.

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"Sin Cataluña no se puede gobernar España"

Su discurso ha ido de principio a fin destinado a menospreciar el voto a los socialistas, no solo ironizando sobre que Sánchez "no es nada" sin los independentistas -en referencia a la dependencia que tiene de ellos en el Congreso-, sino también hurgando en que el PSOE "no es nada" porque tras las últimas autonómicas solo gobierna "un poco" en Asturias, en Castilla-La Mancha y en Navarra "con Bildu". "No será el PSC quien salve de la decadencia a Cataluña, Cataluña no necesita al PSC ni a salvapatrias. El voto al PSOE ya no es nada", ha insistido.

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Sin embargo, Feijóo también ha reconocido que precisamente la poca representación que tiene el PP en estos momentos en Cataluña es su principal tendón de Aquiles a la hora de lograr su propósito de gobernar España, por lo que ha prometido arremangarse para remontar ese suelo que tocaron los populares en 2021. "Todo gobernante sabe que sin Cataluña no se puede gobernar España. Mi compromiso es prioritario porque teniendo un buen resultado en Cataluña conseguiremos gobernar para el conjunto de los españoles", ha asegurado. E incluso ha apelado a la victoria que obtuvo Ciutadans en 2017 -de quien aspira a recuperar votantes a costa de su debacle- cuando ha asegurado que el constitucionalismo ya logró imponerse.

Bajar impuestos

Más allá de presumir de ser el partido anti independentista de cabecera, el PP también trata de sacar tajada luciendo palmito de derechas en materia de gobernabilidad. Por eso Feijóo ha proclamado a los cuatro vientos que si se acaba la legislatura española este año y gana las elecciones generales, bajará el impuesto de la renta con efectos retroactivos desde el 1 de enero. No es baladí que haya lanzado este mensaje vinculado a acabar con la "asfixia fiscal" de los trabajadores y empresas en Cataluña justo el día en que arranca la campaña de la declaración de la renta.

También Alejandro Fernández ha entrado en la agenda de la gestión lanzando al vuelo la preocupación de si saldrá o no agua del grifo por la sequía o blandiendo que Cataluña sea "el paraíso de los ocupas" además de un "infierno fiscal". Tras una renovada confianza en él por parte de la cúpula popular estatal -más por urgencia del calendario que por convicción-, el candidato ha pedido "no tener miedo" a plantar cara al independentismo y ha presentado estas elecciones como la oportunidad para acabar "con el 'procés' y el 'sanchismo'" de una tajada.

Proyectar unidad

El ambiente entre los populares en Cataluña es de euforia, a sabiendas de que sus expectativas, según pronostican las encuestas, pasan por triplicar sus actuales tres diputados en el Parlament. La sala del hotel Catalonia Plaza en la que se ha celebrado el acto del PP se ha quedado pequeña a la hora de cerrar filas y proyectar unidad tras la pugna interna por el candidato. Los populares han confirmado que el segundo puesto de la lista lo ocupará el alcalde de Castelldefels, Manu Reyes, que el tercero será para la concejal de Barcelona Àngels Esteller y el cuarto para el secretario general del partido en Cataluña, Santi Rodríguez. Un elenco de dirigentes veteranos que cuentan con la confianza de Feijóo. Por Tarragona, Lleida y Girona, los cabeza de lista serán Pere Huguet, Montse Berenguer y Jaume Veray.