R. GARCÍA

El día contra la violencia de género fue, paradójicamente, uno de los más duros para las mujeres maltratadas de la ciudad. La Policía detuvo a lo largo de la jornada del jueves a 13 hombres acusados de agredir a sus compañeras sentimentales, un dato que las autoridades consideran muy elevado si se tiene en cuenta la media anual de arrestos por este tipo de delitos.

La Policía Local llevó a cabo seis de estas detenciones mientras que los agentes del Cuerpo Nacional de Policía detuvieron a otros siete acusados. El juzgado de instrucción número 4, el especializado en violencia contra la mujer, fue el encargado de tomar declaración a estos acusados.

Además, la semana se cierra en el capítulo de sucesos con el arresto de un ciudadano de origen moldavo de 44 años acusado de tocarle el culo a dos mujeres. La Policía sorprendió al ahora detenido en la avenida de la Costa. Según los agentes, «el individuo aprovechaba el paso cercano con las mujeres para tocarles el culo y seguir en su recorrido de forma tranquila como si no hubiera pasado nada».

Ante esta falta de respeto, los agentes que se encontraban patrullando la zona decidieron identificar al viandante, que se encontraba ebrio y que «desobedecía reiteradamente las indicaciones de la Policía». Lejos de calmarse, el acusado comenzó a ponerse cada vez más violento durante la actuación policial llegando incluso a propinar varios empujones a los funcionarios policiales que trataban de detenerle. El ahora detenido se abrazó a una farola para evitar su trasladado a la Comisaría.