R. G.
A pesar de que la idea de que los hosteleros locales organicen durante las noches festivas de la Semana Grande de la ciudad celebraciones en la plaza Mayor aún se gestando, algunos de los organizadores han fijado ya su mirada en otros ejemplos de ciudades del entorno como Oviedo, Salamanca o Valladolid. En la capital castellana las ferias se celebran durante el día en numerosas casetas repartidas por el casco urbano de la ciudad. Son los responsables del Consistorio los que fijan los requisitos que deben cumplir cada uno de los hosteleros que pretenden participar en el evento.
Los responsables del Ayuntamiento de Valladolid hacen público, días antes de las celebraciones, un completo dossier en el que se especifican las características que tiene que cumplir cada uno de los locales que participe en la celebración de las fiestas. Todo está regulado. Desde el espacio que ocupa cada bar -que no puede superar en ningún caso los 40 metros cuadrados- hasta el precio que tienen que cobrar los hosteleros por consumiciones, en este caso por pinchos y bebidas alcohólicas que en ningún caso deben superar determinada graduación. Los horarios también están completamente regulados. La Policía Local de la ciudad se encarga de vigilar el correcto cumplimiento de todas estas regulaciones municipales.
En Gijón, por el contrario, la idea pasa por la puesta en marcha de fiestas nocturnas. En ningún caso se ha hablado, al menos por el momento, de la posibilidad de extender estos festejos a toda la jornada. A pesar de todo, aún no se conocen los detalles de la propuesta, que será presentada a los responsables del Ayuntamiento de Gijón en cuanto se cierren todos los detalles. Los encargados del área de festejos podrían dar posteriormente el visto bueno al proyecto.
