Basilio Martínez es, como presidente del Club de Salvamento y Socorrismo de Gijón, el organizador de las III Lifeguard Race Series que hoy sábado tendrán lugar en la playa de San Lorenzo de Gijón. Entre las diez de la mañana y las doce del mediodía se realizará una exhibición. Ya por la tarde se desarrollarán las competiciones desde las seis hasta las nueve de la noche, entre las escaleras 7 y 8 del principal arenal de la ciudad. En las pruebas participarán grupos llegados de Zamora, Santander, Coruña, Benavente y Pontevedra.
-¿Qué es exactamente el Club de Salvamento y Socorrismo de Gijón?
-Este club surge cuando nos juntamos varios compañeros que llevábamos trabajando en salvamento muchos años y que habíamos sacado el título a través de la Federación de Salvamento del Principado. Hasta entonces en Asturias existían clubes de salvamento pero no había actividad en deporte base. Hace tres años empezamos a introducir el deporte en los colegios como actividad extraescolar. De momento trabajamos en 14 centros de Gijón. De octubre a junio desarrollamos la actividad en la piscina de El Coto con varios grupos de niños. A partir de junio llevamos a cabo las modalidades de playa. Tanto en una como en otra hacemos varias pruebas como, por ejemplo, nado surf con tablas de salvamento deportivo. Esas pruebas están adaptadas al trabajo en el mundo profesional. Fuimos los primeros en traer las tablas de salvamento deportivo a Asturias además de rescate profesional. El club ha empezado además hace poco a dar cobertura a eventos deportivos acuáticos. Hemos colaborado, por ejemplo, con Talasoponiente.
-¿Es el gran desconocido este deporte?
-Sí, por eso hacemos eventos como este, muy vistosos y llamativos. Con pruebas de piscina nos hubiera costado más llegar al público, pero ahora hay niños que se apuntan a nuestras actividades porque nos ven en San Lorenzo. En cuanto a la educación, desde hace dos años colaboramos también con la Dirección General de Deportes del Principado de Asturias y con Caja Rural en una campaña escolar que ya llega a más de 800 alumnos de sexto de Primaria de Arriondas a Navia. Para todos aquellos que lo piden hacemos dos clases de salvamento: una didáctica para explicar los peligros del medio acuático y otra más práctica en piscina. Los niños acaban sabiendo rescatar a un compañero.
-Aumentan mucho los accidentes en las costas. ¿Hay menos prudencia?
-La crisis ha afectado mucho al sector profesional. Hay playas que antes se cubrían a diario y que ahora sólo cuentan con salvamento el fin de semana. Pero también es verdad que muchas veces los accidentes se producen fuera de la zona de salvamento. La gente sigue siendo imprudente. Llegan a las playas y no leen los paneles informativos y eso es lo primero que hay que hacer para enterarse de corrientes, oleaje o peligros que existen en ese espacio acuático natural. Todo va por oleadas, pero es verdad que este año está siendo negro.
-¿Es demasiado precario el trabajo del salvamento?
-Nuestros chicos están haciendo salvamento todo el año aunque sea en el ámbito deportivo pero la gente que trabaja en esto lo hace sólo de forma temporal y no tienen la posibilidad de entrenar todo el año con muñecos o tubos. El nuestro es un sector que hay que tener bien cubierto con formación para los profesionales y con información para los usuarios.
-¿Cuáles son los consejos para los bañistas?
-Fijarse en las banderas, preguntar a los socorristas si hay cualquier duda y aunque se sepa nadar, hacerlo siempre paralelo a la costa sin adentrarse mucho en el mar. Si los salvamentos hacen indicaciones nunca es por capricho, lo hacen por la seguridad del ciudadano y hay que hacer caso.
-¿En piscinas se piden las mismas precauciones?
-En cualquier medio acuático hay que tenerlo. En las piscinas hay peligros propios. Hay que tener cuidado con las caídas porque se producen resbalones y traumatismos muy graves.
