La niña de 4 años que resultó herida de gravedad en un accidente de tráfico que tuvo lugar el pasado domingo, minutos después de las ocho y media de la tarde, en la calle Ezcurdia se recupera de sus lesiones en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Central de Asturias, adonde fue trasladada la pequeña después de que los facultativos de emergencias comprobaran que la menor tenía múltiples traumatismos.
La Policía Local continúa entretanto investigando las causas del siniestro, que tuvo lugar a la altura del Grupo Covadonga. Una portavoz de los funcionarios aseguró ayer que en el momento del fatal suceso "la niña herida se disponía a cruzar el paso de peatones con el semáforo en verde junto a su madre y uno de sus hermanos". El vehículo que conducía una mujer que poco antes había salido de las inmediaciones del Grupo Covadonga "tenía el semáforo en ámbar intermitente", según la Policía Local. Los agentes señalan que en un momento dado "la niña se separó de su madre y salió corriendo, no dando tiempo al coche a reaccionar ni a frenar". El Juzgado será ahora el que dirima si de lo sucedido se deben desprender responsabilidades penales.
Los vecinos de la zona lamentaron ayer lo sucedido criticando la "peligrosidad" que a su juicio representa el paso de peatones en el que tuvo lugar el atropello. "El semáforo para los coches está en intermitente y hay mucha gente que no se da cuenta o no lo respeta", relató una gijonesa en conversación con este periódico haciendo hincapié en que por la zona transitan cada día muchos niños por la cercanía de colegios y del Grupo Covadonga.
Se da la circunstancia de que éste es el segundo atropello grave a un peatón que se produce en Gijón en apenas cuatro días, después de que el jueves un hombre de 66 años tuviera que ser trasladado al Hospital de Cabueñes con múltiples fracturas tras ser arrollado por un autobús de Emtusa en la zona de La Guía.
