A las once de la mañana de ayer, Roberto Meana seguía achicando agua con una bomba costeada por su comunidad de vecinos del hueco del ascensor en la calle Domingo Juliana. "Ayer estuvimos sacando agua hasta la noche y al despertarnos estaba otra vez inundado", reconoce con resignación.
En la frutería, en las cafeterías, corrillos por las esquinas y hasta en el estanco. No hubo vecino ni comerciante de la calle Brasil -y aledañas-, en el barrio de La Calzada, que ayer no hiciera alusión a la lluvia que anegó los establecimientos e inundó bajos y portales. En el ambiente se palpaba un halo a "déjà vu", porque poco más de un año después de la última inundación se repetían los hechos. Y todos los vecinos se hacían ayer, a pie de calle, la misma pregunta. ¿Por qué no se ha hecho nada en un año?
"Necesitamos una solución y la necesitamos ya. Así no podemos seguir porque esto afecta a nuestra salud", exige Eva María Díaz, en cuya tienda de alimentación comienzan a fallar las máquinas por las humedades que provocó hace quince meses un suceso similar en la zona. "Nos dicen que reclamemos, ¿qué vamos a reclamar?, nuestra reclamación es que nos den una solución ya", añade. Sus problemas los entiende y comparte Ana Menéndez, del centro de belleza "Sol" y quizás la más afectada de la zona cero. En la puerta tiene colgado un cartel de "cerrado por inundación". "Ahora estaba empezando a remontar después del año pasado y no podré reabrir hasta el martes", señala en el interior de su local donde ni siquiera puede dar la luz.
Una vez bajaron las aguas de la calle entraron en escena el gerente de la Empresa Municipal de Aguas (EMA), Vidal Gago Pérez y el concejal de Mantenimiento y Obras de Infraestructuras, Manuel Arrieta. Fue llegar y caerles un buen chaparrón encima. "Más soluciones, que os laváis las manos y sólos os preocupaís de vuestro sillón", reprochó Hortensia Ordiales al paso de la autoridad. También tuvo reproches para los concejales socialistas que fueron a primera hora a interesarse por los problemas vecinales. "Teneis que venir más a hablar con los ciudadanos", le espetó Hortensia Ordiales a José María Pérez.
"No es comprensible que la EMA tenga 28 millones de euros para inversiones sin utilizar y el gobierno de Foro siga sin tener un horizonte claro sobre cómo abordar el problema", critica el portavoz socialista José María Pérez acompañado por los ediles César González y Marina Pineda. El reproche fue mayor al entender que se trató el problema se extiende a más barrios, como Portuarios y Pescadores, y que se trató de "una lluvia relativamente importante se acaba convirtiendo en un problema grave para la ciudad, algo que hace décadas que no sucedía", analizó no sin recordar al equipo de gobierno local, tras cotejar opiniones con vecinos y comerciantes, que éstos "siguen padeciendo las consecuencias económicas de la inundación de hace más de un año" pues parte de los daños están sin compensar "porque el Ayuntamiento decidió que no admitía ciertas justificaciones".
"Las circunstancias meteorológicas escapan obviamente a cualquier administración pública; pero la previsión de estas situaciones de riesgo, así como las medidas correctoras que impidan que los vecinos sufran sus consecuencias, sí son competencia y responsabilidad de nuestro Ayuntamiento", reprocha el Partido Popular que ayer también visitó las inmediaciones de la zona afectada. Los populares Mariano Marín, Pablo González y Sofía Cosmen pusieron énfasis en la necesidad "de un pozo de tormentas en la zona del Arbeyal". Una prioridad también para el resto de la corporación.
José Carlos Fernández Sarasola, portavoz de Ciudadanos, solicitará en la próxima comisión de Hacienda una línea de ayudas extraordinarias así como información y asesoramiento a los afectados. Subsanados estos aspectos es también partidario del pozo de tormentas para "reforzar la capacidad de alivio de la red en esa zona". Xixón Sí Puede, por su parte, reivindica la urgencia en la gestión desde el Ayuntamiento de indemnizaciones a las familias afectadas al tiempo que recuerda que las grandes inundaciones en La Calzada habían coincidido con el Pleno de constitución de la nueva Corporación "y desde entonces, hace quince meses, no se hizo nada", sostiene Mario Suárez.
La solución parece clara no así los plazos en que se verá concluido el pozo. "Llevo cinco semanas aquí y el próximo será mi primer consejo de administración, uno de los puntos es el tanque de tormentantes que es el elemento que acabará con estas inundaciones", se excusó el gerente de la EMA, Vidal Gago. "Sacaremos la licitación de la redacción del proyecto el jueves, previsiblemente con la aprobación del consejo, y la semana siguiente estará licitado", sostiene. No obstante prefiere no hablar de fechas, por precaución pues "no podemos permitirnos que suceda lo mismo que con el pozo del parque Hermanos Castro". "En unos meses, ocho o nueve, los que sean, tendremos aprobado el proyecto para lanzar la obra a licitación, se hará la adjudicación y empezaremos a trabajar", resume Gago. Unos pasos acogidos con recelo ayer en la zona porque siguen sin entender qué se ha hecho durante un año.
