"Blue" es un perro de 3 años, de raza border collie, y forma parte del Servicio Cinológico de la Guardia Civil de Gijón. Ayer se esforzó al máximo, como si formara parte de un dispositivo, para mostrar a un centenar de visitantes el funcionamiento efectivo de su unidad. La jornada de exposición estática y exhibición en el acuartelamiento de Contrueces contó con la presencia del colectivo de personas con discapacidad "Plena Inclusión", y tenía el objetivo de "acercar la Guardia Civil a la sociedad, humanizarla y dar a conocer los medios de los que disponemos", resaltó Celia Doval, portavoz de la Benemérita en Gijón.
En la exhibición, celebrada ayer por la mañana en Contrueces, participaron las unidades de la Policía Judicial, el Servicio de Protección a la Naturaleza (SEPRONA), la patrulla de Seguridad Ciudadana, Tráfico, el Grupo de Rescate e Intervención en Montaña, el Grupo Especial de Actividades Subacuáticas, el Grupo Especial de Desactivación de Explosivos (Gedex), el Servicio Cinológico y el Servicio Marítimo.
José Luis Villa forma parte de la unidad del Servicio Cinológico y explicó a los asistentes que un perro policía puede trabajar a pleno rendimiento durante ocho años y seguir mejorando cada día. "La jornada de hoy nos sirve para que se quiten también los miedos hacia estos animales, y vean cómo se entrenan, trabajan y las capacidades que tienen", destacó. "Blue" fue una de las atracciones para el centenar de componentes de "Plena Inclusión", pero también lo fueron el dispositivo de Tráfico, los materiales del grupo de rescate de montaña o la forma en la que se desactivan los explosivos.
En este último caso, Plácido Pérez, sargento primero y jefe del Grupo de Desactivación de Explosivos, mostró a los asistentes los elementos con los que trabajan, desde el traje antibomba, el robot de desactivación, el detector de metales o el equipo de rayos X. "Afortunadamente sobre el tema del terrorismo no hay apenas incidencia en Asturias, pero intervenimos en todo tipo de artefactos explosivos, que pueden aparecer al reformar una casa, y que pueden proceder de la Guerra Civil", señaló antes de apuntar que "realizamos entre 80 y 100 intervenciones al año".
También hizo hincapié en sus explicacione Jesús Olivera, del Grupo de Rescate e Intervención de Montaña, al recordar a los asistentes que "la montaña es divertida, pero no un juego; requiere mucho material y preparación para ir con seguridad". Por eso recordó la necesidad de acudir al monte con "casco, arnés, GPS, mapa o brújula" e incidió en la importancia de no confiarse: "En Asturias la meteorología cambia, nadie es perfecto, ni estamos exentos de un accidente, por eso es importante cuidar todos los detalles".
La jornada fue interactiva. No solo las unidades de la Guardia Civil mostraron su forma de trabajar y explicaron su metodología, también los miembros de "Plena Inclusión" trasladaron sus inquietudes y preocupaciones de cómo les gustaría que fuesen atendidos si se vieran involucrados en una situación de riesgo. Una forma de acercar la Guardia Civil a la sociedad, y conseguir "quitarle esa imagen de coco que se pueda tener de los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado en algunas ocasiones", concluyó Celia Doval.
