"Necesitamos diez técnicos especialistas en extinción de incendios. Y los necesitamos ya". La alcaldesa, Carmen Moriyón, aprovechó la festividad del patrón de los Bomberos, San Juan de Dios, para exigir al Gobierno nacional que permita un aumento de personal en este servicio municipal que actualmente cuenta con 99 efectivos. Unas cifras que en palabras de Moriyón suponen un agravio comparativo con otras ciudades de similar tamaño como son Vigo, La Coruña o Vitoria, "ciudades que cuentan con dotaciones que oscilan entre los 130 y 156 bomberos", recriminó.

Moriyón reconoció ayer que el servicio de prevención y extinción de incendios en la ciudad "tiene un problema grave". "Hay 15 plazas vacantes de técnico especialista y se han producido cuatro jubilaciones el pasado año", apuntó. Cuatro jubilaciones que la ley permite reponer mediante su inclusión en la Oferta Pública de Empleo pero no así las restantes. Un problema motivado por la orden del Ministerio de Hacienda, abanderado de la "lucha contra el déficit público", que no debería afectar a Gijón porque "tiene una situación saneada para afrontar esas contrataciones", según la líder local de Foro.

Antes de felicitar el día a los bomberos presentes y proceder con la entrega de distinciones, Carmen Moriyón aproximó su discurso a un tono más agorero y para curarse en salud quiso dejar constancia de su posición. "Nadie está libre de la mala fortuna, pero si un día sucediera algo irreparable que no nos acompañe el remordimiento", aseguró. "Que no sea por dejadez, por haber dejado las cosas como estaban cuando se estaba a tiempo de cambiarlas", incidió.

Tras la reclamación de Moriyón se procedió a la entrega de distinciones, tanto a bomberos jubilados desde la última festividad como a otros cuerpos de seguridad de la ciudad y ciudadanos que colaboran estrechamente con el cuerpo de bomberos de Gijón. De esta forma, los primeros en recibir sus insignias fueron el sargento Vicente García Fernández -ausente en la entrega- y Gonzalo Álvarez Fernández, ambos bomberos. Tras ellos llegó la gratitud para Policía Nacional, Guardia Civil y Policía Local. Por último se ensalzó con unas placas el vínculo y la colaboración de bomberos con Enrique Costales; Xuan Fernández, experto en aves; Rafael García, del Centro de Seguridad Marítima Integral Jovellanos y Gerardo Fernández Suárez, responsable de Desguaces Gerardo. También hubo una ofrenda floral en honor de los dos bomberos fallecidos en acto de servicio en 2005, José Antonio Regueiro y José Ramón Bulnes, y una placa que recuerda a la perra "Beltza", muerta el pasado verano.

Tras la ceremonia protocolaria de entrega de distinciones los bomberos celebraron una exhibición en sus instalaciones del parque de Roces, como colofón a todas las actividades realizadas desde el 8 de marzo -onomástica de San Juan de Dios- como la carrera ciclista o el fin de semana de puertas abiertas. Durante la muestra, en que simularon el rescate de un operario caído en un tejado, utilizaron una de las últimas adquisiciones del parque, un camión con escalera -que alcanza los 30 metros- que facilita su función al poder enganchar una camilla para el rescate en la cesta. En esta labor participaron varios bomberos del cuerpo: Jano, Miguel, Sergio, Wladi, Verdes y Rey. La voz de los bomberos ayer estuvo representada por Fernando García, jefe del servicio, que destacó la "encomiable labor" que sus compañeros realizan en Gijón cada día.