El concejal responsable de Emtusa, Esteban Aparicio, mostró ayer su confianza en que se pueda alcanzar a principios de septiembre una solución negociada con la empresa encargada de la comercialización de la recarga de los bonos de autobús, sin tener que recurrir a los tribunales para rescindir el contrato, algo a lo que el gobierno local acudirá "si no tenemos otro remedio".

Aparicio recordó que agosto es un mes inhábil en los juzgados, por lo que en cualquier caso no se podría plantear este mes la rescisión si se da un "incumplimiento radical" del contrato. Aparicio señaló que tanto a él como a la empresa les gustaría que estuviera solucionado ya, pero "milagros a Lourdes".