La unidad de Neonatología de Cabueñes se está llenando de gorritos de lana. Y todo por la puesta en marcha un proyecto lleno de amor para humanizar la atención a sus pacientes más pequeñitos y vulnerables: los neonatos que precisan cuidados intensivos. Gracias al cariño de los voluntarios que colaboran en este proyecto, los bebés disponen de un gorrito de lana de colores para darles la bienvenida al mundo de la forma más cálida posible, aún con todas las dificultades que tengan que afrontar. Se trata del denominado "Proyecto Gaela", que surgió en la unidad gijonesa "ante la necesidad de impulsar la humanización de la asistencia en las unidades de cuidados intensivos neonatales". Y en esencia, propone la confección de gorritos tejidos a mano por voluntarios y de manera altruista, para donar a los bebés prematuros de 32 semanas de gestación o peso menor a 1500 gramos ingresados en cuidados intensivos de Neonatología.
El objetivo es el de "hacer un poco más amable el entorno, sobre todo para las familias, porque no es fácil ver a los niños tan pequeñitos ingresados con cables y vías", explica la supervisora de Neonatología, Gemma González Mencía. Los gorritos llevan el logo de una ovejita diseñado por Lydia Medina Paredes, hija de un trabajadora de la unidad. Ella propusto también el nombre de "Gaela", un término céltico que describre la dulzura y la determinación por sobrevivir. El proyecto ha sido un éxito. "Igual tenemos que poner una tienda", bromea la supervisora antes de agradecer la implicación tanto de compañeros como de personas ajenas al hospital que han tejido esperanza en forma de diminutos gorritos.
