Ni un solo voto a favor cosechó ayer Foro en la comisión municipal de Hacienda en favor de su diseño de Plan Económico-Financiero, un documento con los ajustes del gasto municipal para 2018 y 2019 que le viene impuesto por ley al Ayuntamiento de Gijón tras haber incumplido con la regla de gasto en la ejecución presupuestaria de 2017. La propuesta presentada por la edil de Hacienda, Ana Braña, se llevó el no de los concejales de PSOE, Xixón Sí Puede e IU. PP y Ciudadanos optaron por la abstención. Un prólogo a la votación que tendrá lugar en el Pleno del próximo día 18 y que, salvo milagro de última hora, reforzará la falta de respaldo político de la Corporación a las cifras foristas que fijan los parámetros económicos del Ayuntamiento en lo que queda de este mandato de Carmen Moriyón.

La izquierda municipal en bloque ya había advertido desde el primer momento que no asumirían un plan que consideran de "recortes" en ámbitos tan sensibles como la política social, el empleo o las obras en barrios. De hecho, intentar frenar ese diseño de Plan era una de las ideas de la moción de censura contra Moriyón, que no llegó a pasar de la fase de reproches entre los tres partidos de la izquierda. El límite de gasto para 2018 es de 210,5 millones y de 216,1 para el año que viene. En su cumplimiento se tiene en cuenta la gestión del Ayuntamiento pero también de Emulsa, Divertia, la Empresa Municipal de la Vivienda, las fundaciones de Servicios Sociales y Cultura y el Patronato Deportivo Municipal.

Con o sin apoyo del Pleno, el gobierno de Foro tiene previsto aplicar las medidas que conforman este Plan Económico-Financiero. La actuación del Ayuntamiento será fiscalizada por el Principado como entidad tutelante aunque ese control no supone que el gobierno autonómico fije criterios sobre las decisiones concretas que tome el Ayuntamiento. Sólo debe controlar que se respete el límite de gasto fijado. "Hemos hecho un plan muy detallado pero hay detalles que pueden ir cambiando y es solo cuestión de ir comunicándolos. Siempre respetando ese límite de gasto", explicaba ayer Braña. Al tiempo que ponía en valor el trabajo conjunto que ya se ha venido realizando con el Principado en ese asunto.

Para tratar del Plan hubo ya dos reuniones de la Alcaldesa y su edil de Hacienda con la consejera de Hacienda, Dolores Carcedo y la directora general de Finanzas y Economía, Mar García Salgado. El Principado tuvo acceso al borrador y ayer mismo se les envió el documento definitivo para que lo puedan ir ojeando y así ganar tiempo ya que el Principado sólo puede informar sobre el Plan una vez cumple el requisito legal de pasar por el Pleno. La intención del gobierno de Foro es hacer controles mensuales de la ejecución presupuestaria e informar de ellos al Principado. Del PEF de Gijón también tendrá que ser informado el Ministerio de Hacienda.

Tener que cumplir con un Plan Económico complica aun más la ya de por sí complicada gestión del día a día en el área de Hacienda, que juega desde enero en un escenario de prórroga presupuestaria que obliga a un ir y venir de modificaciones que exigen acuerdos en el Pleno, que no siempre se logran ante la mayoría de izquierdas. Y todo puede enredarse más porque, por ejemplo, se complica la opción de un presupuesto para 2019. Aunque siendo año electoral, las posibilidades para Foro de encontrar apoyos en el Pleno ya eran mínimas.