La Asociación de Escritores Noveles de Gijón ha decidido suspender su actividad por problemas con su local actual. El inmueble, situado en la calle Picos de Europa, comparte suministro eléctrico con el local contiguo, una de las sedes de la Asociación Asperger de Asturias. Esta circunstancia ha derivado en "falta de luz y de teléfono", según denunció ayer José Ángel Jarne, director de comunicación de la asociación, que lleva 15 años activa.

"Al tener una sola caja de luz dependemos de la Asociación de Asperger para todo", explica Jarne. "Puede ser que aquí no haya nadie y esté la luz encendida", añade. No ha sido el único problema: "El viernes pasado teníamos una conferencia y como tampoco nos suena el timbre, mucha gente se quedó fuera", relata.

La asociación asegura que ha dado parte de la situación al Ayuntamiento desde mayo del año pasado, cuando la entidad se mudó al local. "Lo único que han hecho ha sido darnos largas. Ni siquiera han querido venir aquí para ver de cerca la situación", denuncia. "Les hemos pedido un ajuste presupuestario para realizar la obra y han dicho que no".

Mientras tanto, la asociación ha continuado con su actividad a raíz de acuerdos con la entidad vecina. "Hicimos un apaño con los cables para poder tener aquí conexión a internet, luz y teléfono. El cableado es tan aparatoso que ya se han caído dos personas", denuncia. "Es indecente".