Un hombre de 33 años de edad, vecino de Bilbao, fue detenido en la madrugada del 21 de diciembre en Gijón por agentes de la Policía Nacional acusado de sustraer ropa y perfumes en comercios de Gijón. El varón fue pillado en la estación de autobuses con trajes de caballero, vestidos de fiesta y perfumes de lujo. En total, el valor del botín superaba los 1.000 euros.

Los agentes adscritos al Plan Preventivo de Comercio Seguro detectaron de madrugada en la estación de autobuses a una persona que habían visto ese mismo día por el eje comercial de Gijón manteniendo "una actitud sospechosa" pero sin que se le hubiesen sorprendido cometiendo una ilegalidad. En la estación, no obstante, iba cargado con tres grandes bolsas de deporte y "se mantenía vigilante e inquieto", según la policía, por lo que los agentes procedieron a comprobar el contenido de sus bolsas.

En ese momento, los policías constataron que las prendas de ropas que portaba eran nuevas y tenían las etiquetas cortadas y las alarmas desactivadas. Llevaba 8 trajes de caballero, vestidos de fiesta, pantalones, camisas, zapatos, y 3 camisetas de deporte del Real Madrid. También ocho botes de perfume de mujer y caballero que superaban los 80 euros cada uno. En los laterales de las bolsas se hallaron unos alicates y las etiquetas que habían sido cortadas. El identificado no supo dar ninguna explicación sobre la procedencia de las ropas.

Ante estas evidencias fue detenido como autor de un delito de hurto y se pudo acreditar que todos los efectos intervenidos habían sido sustraídos de tiendas del centro y del Llano de Gijón. Los efectos sustraídos superaban los 1000 euros y el arrestado manifestó que quería enviarlos a su país de origen, Camerún. El detenido tenía detenciones anteriores en Oviedo, León y Bilbao por hurtos cometidos en esas ciudades.