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Los colegios gijoneses, asediados con ofertas para adquirir un aparato "antiasfixias"

"Lo hemos utilizado dos veces y funciona", dicen desde una residencia de ancianos Los médicos piden cautela: "Ningún estudio científico lo avala"

Un dispositivo manual para desobstruir las vías respiratorias durante un atragantamiento. En las últimas semanas una empresa estadounidense se ha puesto en contacto con la mayoría de los centro educativos públicos de Gijón para ofrecerles este novedoso aparato. El instrumento, sin embargo, y pese a que se utiliza desde hace ya dos años en una residencia de ancianos de la ciudad, no cuenta de momento con la confianza de buena parte de la comunidad sanitaria. "No hay ningún estudio científico que avale esa forma de proceder", aseguran.

Como su uso no está del todo extendido, en el sector científico-médico reina la falta de consenso. Una doctora local del SAMU, por ejemplo, asegura que "ningún organismo público" recomienda el uso de estos dispositivos. "No hay suficientes estudios ni a favor ni en contra, pero muchos profesionales creemos que su uso podría ser incluso peligroso", asegura, ya que considera que si este dispositivo "se pone de moda" podría dejar en un segundo plano las maniobras tradicionales. "La gente no está formada en primeros auxilios; no se debería perder el tiempo buscando el nuevo aparato de turno. Los primeros segundos de un atragantamiento son fundamentales y lo que sabemos que funciona son las maniobras de reanimación", explica.

Responsables del Centro del Profesorado y Recursos (CPR) de Gijón confirman que en las últimas semanas "casi todos los colegios de la zona reciben ofertas de forma masiva" para adquirir estos utensilios. "No tenemos forma de controlar que esto pase, pero la comunidad sanitaria nos dice que esto, hasta nuevo aviso, podría ser muy peligroso. Su prioridad y la nuestra es que los alumnos se formen mejor en primeros auxilios; ya estamos trabajando en ello", explican. "Esos correos llegaron al día siguiente de que falleciese un alumno matriculado en este colegio. No me parece seguro succionar con un aparato en la garganta de un niño, pero es que además las formas y el día en que se nos lo ofertó dejó mucho que desear", lamenta Mikel de la Torre, director del colegio Atalía, centro en el que estudiaba el niño del Natahoyo que murió atragantado con una uva en Nochevieja.

En España hay dos marcas conocidas que distribuyen este tipo de dispositivos. "A nosotros nos lo pidió un médico para llevar a su residencia y lo vendemos desde entonces. Se supone que viene a ser un sustituto de la maniobra de Heimlich", explican los responsables de una tienda local de productos ortopédicos.

También hay una residencia de ancianos que cuenta desde hace dos años con uno de estos aparatos. Una de sus trabajadoras, la doctora Gema Bulnes, explica cuáles son sus ventajas: "Tiene una mascarilla que se pone en la zona orofacial con un tubo con el que se aspira el cuerpo obstruido. Después tiene un tirador de presión negativa, que es como el émbolo de una jeringa y que es lo que consigue que el objeto salga a la superficie", resume. Aunque asegura que han empleado este dispositivos en dos ocasiones, ambas saldadas "con mucho éxito", reconoce que el primer paso ante un atragantamiento siguen siendo los primeros auxilios. "Tenemos que priorizar la maniobra de Heimlich y las palmadas interescapulares. Esos serán siempre los primeros pasos a realizar. Si eso no funciona, está bien contar con un dispositivo como este como posible segunda opción", explica. La directora de la residencia, Paloma Ordieres, no conoce ningún otro centro de la ciudad que cuente con estos aparatos. "Lo tenemos desde hace dos años pero a día de hoy sigue siendo muy novedoso y muy poco común. Nosotros, de momento, estamos contentos de tenerlo", concreta.

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